Mucho se viene hablando de lo bueno del operativo en las rutas, pero poco se dice de la inseguridad en las localidades balnearias de la Provincia. Los ataques sufridos por turistas en la costa atlántica se repiten en el tiempo. La temporada veraniega de la inseguridad arrancó sin límites, y no es exclusividad de un solo distrito.
La seguidilla de robos se reitera en va-rias ciudades. La modalidad, calcada: de-lincuentes que ingresan en las viviendas
y que no tienen límites en amenazar y re-ducir a los distendidos turistas. Villa Gesell, Partido de La Costa, Mar del Plata, Pinamar, Miramar y Necochea forman parte de los distritos que fueron elegidos por los ladrones para atacar y adueñarse de lo ajeno.
Cada comuna tiene su dirección o secretaría de Seguridad, que en muchos casos cuenta con Policía Comunal o Municipal, pero que la responsabilidad la tiene la Policía Bonaerense; ante esto, los jefes comunales se defienden señalando que quedan sujetos al trabajo policial y a las determinaciones de la Justicia.
El plan de seguridad vial involucra a ocho mil policías, 600 patrulleros, más de 500 motos, 5 helicópteros, unidades de ambulancias y bomberos. General Pueyrredón lidera el ranking de municipios elegidos por la sociedad para veranear, y eso conlleva que los robos aumenten, debido a que la ciudad triplica su cantidad de habitantes. Según César Ventimiglia, coordinador del Programa de Protección Ciudadana del gobierno de Gustavo Pulti, el balance del mes de enero en materia de seguridad es medianamente positivo. Vale recordar que la semana pasada robaron 80.000 pesos de la caja fuerte del céntrico teatro municipal Colón de Mar del Plata.
Otra de las ciudades golpeadas por el vandalismo es la comandada por Jorge Rodrí-guez Erneta. Por la inseguridad, Villa Gesell se declaró en estado de emergencia en los primeros días de 2013.
Pinamar tampoco escapa a este flagelo. En la polémica ciudad, Agustín Orión fue una de las víctimas de los cacos. Al arquero de Boca le sustrajeron bienes personales de su vivienda, cuando ésta estaba vacía.
La tranquila San Clemente del Tuyú es otro de los sitios que sufren la ola de robos. El municipio gobernado por Juan Pablo de Jesús parece que sólo pone el esfuerzo en las localidades más importantes del distrito, pero olvida el resto de sus playas.
Los robos no sólo se producen en los balnearios tops de la costa provincial; Miramar, por ejemplo, también los padece, y sus principales víctimas son los turistas y las inmobiliarias. En Necochea señalaron que el trabajo que se viene realizando en materia de seguridad es “un éxito”. Similar situación se percibe en el municipio de Lobería, según expresaron desde la comuna.
En fin, el plan presentado por Scioli no está causando el efecto esperado. Los 8 mil policías, los 600 patrulleros y los 5 helicópteros parecen que no son suficientes para erradicar el flagelo de la inseguridad en el territorio bonaerense. |
