El intendente de Avellaneda, Jorge Ferraresi, encabezó una serie de reuniones y acciones en el que dejó en claro las diferencias con Máximo Kirchner. El alcalde, de los más cercanos al gobernador Axel Kicillof, también es visto como uno de los posibles nombres para hacerse con la presidencia del PJ bonaerense. Las señales de la interna que promete varios capítulos y una resolución incierta.
El peronismo se encuentra en un laberinto del que no logra salir mientras el gobierno de Javier Milei aprovecha la confusión para avanzar con su plan motosierra. En este marco, en la provincia de Buenos Aires se observan movimientos que dan cuenta de la profundización de la grieta interna en el justicialismo.
En los últimos días, Ferraresi protagonizó distintas acciones que pusieron sobre la superficie -una vez más- la bronca existente con Máximo Kirchner. El presidente del PJ bonaerense y líder de La Cámpora es cuestionado por distintos sectores internos y como consecuencia el Grupo de Ensenada (encuadrado con Axel Kicillof) aparece como el principal polo crítico.
El lunes el alcalde de Avellaneda se reunió con Juan Grabois, máximo referente del Frente Patria Grande. Además, estuvieron presentes la diputada nacional, Natalia Zaracho, y el senador bonaerense, Federico Fagioli. El jefe comunal indicó que fue "para evaluar la situación política".
"Los que siempre peleamos por una Patria con justicia social tenemos el deber de cumplir con nuestra gente y cuidar cada uno de los derechos conquistados". dijo y añadió: "La participación y el compromiso de todos los sectores será fundamental". El encuentro con uno de los dirigentes más críticas a La Cámpora no pasó desapercibido y repercutió internamente.
En tanto, también recibió al exconcejal de Quilmes, Gabriel Berrozpe. En cualquier contexto no pasaría de una de las tantas actividades de cualquier hombre de la política, pero en pleno internismo del peronismo posee otro significado. El referente local fue quien desafió a la intendenta Mayra Mendoza a ir a unas PASO en agosto, pero finalmente no se dio la contienda. No obstante, se encuentra por fuera de la estructura de la mandamás en el distrito de la Tercera Sección.
"Coincidimos en la necesidad de incentivar la construcción multisectorial y acompañar al gobierno provincial para cuidar a cada uno de los bonaerenses frente a un proyecto nacional de ajuste", sostuvo Berrozpe.
Asimismo, la semana pasada, Ferraresi recibió al jefe de Gabinete de la Ciudad de Buenos Aires, Néstor Grindetti, lo que despertó ciertas suspicacias. Es que el encuentro institucional entre ambos se dio luego de que en Lanús la tensión interna escalara a un nuevo nivel con la ruptura del bloque de concejales de Unión por la Patria. Allí, el intendente local, Julián Álvarez -proveniente de las filas de Máximo Kirchner- mostró su descontento luego de que la edil Belén Berrueco -que responde al alcalde de Avellaneda- dejara la bancada oficialista por diferencias con el mandamás local.
Las diferencias entre los dirigentes no son nuevas, pero se profundizaron en los últimos meses. De hecho, en el acto de asunción en diciembre pasado, Ferraresi se expresó con críticas que sorprendieron por su beligerancia. Allí, lanzó: “Axel resistió el embate de algunos que pretendían que no sea nuestro candidato a gobernador”. Las palabras hicieron alusión a quienes planteaban que el gobernador diera la disputa por la presidencia y entre ellos se encontraba Máximo Kirchner. Por lo que replicó: “Algunos decían que no tenía que ser candidato y ganó la elección de manera contundente. En el 2025 se empieza a construir el triunfo del 2027 y necesitamos acompañar a Kicillof".
La interna en el peronismo cobra temperatura al tiempo que varios dirigentes proponen posponer las definiciones para abril. Es que entienden que por el momento es prioridad dar batalla contra el DNU y la ley ómnibus de Javier Milei. No obstante, exigen al PJ que tome cartas en el asunto con acciones políticas. Mientras tanto, a la espera de movimientos partidarios, Kicillof activó su intervención en el territorio con la conformación de multisectoriales en varios municipios. Las mismas son impulsadas por organizaciones políticas, sindicales y sociales encolumnadas bajo el ala del gobernador bonaerense y carecen de la participación de sectores vinculados a Máximo Kirchner.
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