“Seguimos bailando al ritmo del PRO, estamos como antes de las PASO”, fue la sentencia de un dirigente de Juntos por el Cambio bonaerense, marcando el estado de fastidio que se expande por la alianza ante el nuevo escenario político nacional y provincial.
El triunfo del libertario Javier Milei provocó un sacudón en las estructuras amarillas, que impulsó a un sector de ese espacio a acercarse al economista de la motosierra y amenaza con romper la hasta ahora monolítica unidad cambiemita.
La resurgida figura de Mauricio Macri, que llenó de elogios al presidente electo incluso ante de ganar las generales, fisuró la confianza entre el exmandatario y parte de sus tropas. En las últimas horas, el otrora inquilino de la Casa Rosada buscó imponer sus intereses con exigencias hacia Milei, convencido de que el triunfo de La Libertad Avanza lo tiene como uno de los progenitores.
Con Patricia Bullrich confirmada como ministra de Seguridad, la relación entre la derrotada candidata de JxC y Mauricio no es la mejor, y se habría exteriorizado en las últimas horas, con un escenario de negociación que tiene al Congreso como campo de batalla.
Presionada por varios actores de su espacio, la exministra de Seguridad decidió dar un paso al costado como presidenta del PRO nacional (a nivel provincial lo conduce Daniel Reich, senadora y esposa del intendente de Tres de Febrero, Diego Valenzuela), lo que abre el juego para elegir nuevas autoridades en elecciones futuras.
Por el momento, la conducción libertaria no termina de definir que Cristian Ritondo presida la Cámara de Diputados, como quiere Macri, un elemento que tendría gravitación sobre la realidad provincial.
“Si Cristian logra ser presidente de Diputados, su peso específico en la provincia de Buenos Aires crece exponencialmente y podría convertirse en uno de los referentes”, señaló un legislador amarillo bonaerense, anticipando una lucha intestina por los liderazgos.
Así, los alineamientos amarillos con La Libertad Avanza condicionan no solo los propios, sino también a la conformación de los bloques en la Legislatura bonaerense. Allí, las tensiones amenazan con romper la unidad, con chances de que las divisiones separen a los PRO, alejen a los radicales a un bloque propio y hagan definir posiciones a los aliados menores.
El eje Ritondo-Grindetti, que convocó a un cónclave días atrás, cuenta con soldados en la Legislatura bonaerense. En la foto tomada durante el encuentro estaban, además de los dos referentes máximos, el vicepresidente de la Cámara baja, Adrián Urreli, y los legisladores Matías Ranzini, Rita Salaverry, Jorge Schiavone, Florencia Retamoso y Sofía Pomponio (responde al alcalde marplatense, Guillermo Montenegro). También posó el platense Fabián Perechodnik, quien jugó con Diego Santilli en la PASO.
Claro que, además del exministro de Seguridad bonaerense, otros competidores se anotan en la carrera, como Jorge Macri, el “Colo” Santilli o María Eugenia Vidal, que medita volver a tierras provinciales.
En Diputados, Bullrich tendrá las manos de Florencia Retamoso (21-25) y de la marplatense Sofía Pomponio (23-27), mientras que a Ritondo responden la lujanense Rita Sallaberry (23-27) y el hombre de Zárate Matías Ranzini (21-25). Adrián Urreli (21-25) está alineado a Grindetti.
Por el lado de Diego Santilli, despegado ya del ala de Horacio Rodríguez Larreta y cercano a los libertarios, están Agustín Forchieri (23-27) y el exintendente de Quilmes Martiniano Molina (23-27).
Lo mismo sucede con la juninense María Laura Ricchini (23-27), quien se referencia en Jorge Macri. María Bustos (21-25), a través del alcalde de Pergamino, Javier Martínez, tiene relación cercana con Jorge Macri y con Daniel Angelici, a quien reporta directamente el pehuajense Fernando Rovello (23-27). Pese a su amistad con Mauricio Macri, el Tano no se ha expresado sobre el balotaje.
En un camino más definido hacia la neutralidad parecen estar la exintendenta de Baradero Fernanda Antonijevic (21-25) y Oriana Colugnatti (23-27), que reporta al alcalde de Tres de Febrero, Diego Valenzuela. De la línea del platense Julio Garro son Fabián Perechodnik (21-25) y Julieta Quintero (21-25), mientras que el bahiense Fernando Compagnoni (21-25) y la rosaleña Abigail Gómez (21-25) reportan al exdiputado Santiago Nardelli. Por último, Martín Endere (23-27) es del espacio de Ezequiel Galli, quien ya se pronunció en contra de Macri.
Por su parte, Emilio Monzó, impulsor de la neutralidad dentro de Juntos por el Cambio, cuenta con la dirigente de Alberti Silvina Vaccarezza (23-27) y el bahiense Lorenzo Natali (21-25).
En el Senado también habrá variada representación. El marplatense Alejandro Rabinovich es el actual jefe del bloque y pertenece al espacio del intendente de General Pueyrredon, Guillermo Montenegro.
Daniela Reich (21-25) es presidenta del PRO de la Provincia. Esposa del intendente de Tres de Febrero, Diego Valenzuela.
María Emilia Subiza (23-27): es de San Nicolás y responde al espacio que conduce el jefe comunal Passaglia.
Juan Manuel Rico Zini (23-27): del espacio del intendente de Pergamino, Javier Martínez, alineado a Jorge Macri.
Yamila Alonso (21-25) responde al mandamás de Junín, Pablo Petrecca, quien juega con Jorge Macri.
Marcelo Leguizamón (23-27): su terminal política es el intendente de La Plata, Julio Garro, quien jugó con Santilli en la interna amarilla.
Jorge Schiavone (23-27): de Lanús, responde directamente a Néstor Grindetti.
Christian Gribaudo (21-25), expresidente del bloque, está en el sector de Daniel Angelici y cercano a Jorge Macri.
Aldana Ahumada (21-25): del espacio que se referencia en Cristian Ritondo. De Merlo.
Alex Campbell (23-27): actual diputado, asumirá en el Senado. Vidalista y cercano a Ritondo, se mantiene neutral.
Florencia Arietto (23-27): jugó para Santilli y, pese a haber sido del FR, se encuentra más cercana a la postura de Milei.
|
