Luego de aceptar la renuncia de Martín Insaurralde como Jefe de Gabinete, el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, disertó en la Universidad de General Sarmiento en la Jornada por el Derecho a la Ciencia y la Universidad Pública y gratuita.
Lo hizo junto a la rectora de la casa de estudios, el ministro de Infraestructura, Leonardo Nardini, el ministro de Producción, Augusto Costa, y su par de Cultura y Educación, Alberto Sileoni.
Su discurso comenzó con críticas al sistema educativo cuando el gobernador transitó la universidad: “Copiarle el plan de estudios a las universidades norteamericanas no era buena idea. Pasaba por alto dos cuestiones: la primera es que los planes de estudios estaban hechos desde el punto de vista conceptual y teórico convencional. Era una teoría económica que tomaba solamente una escuela de pensamiento, una escuela neoliberal”.
Allí aparecieron las críticas hacia el neoliberalismo: “Domingo Cavallo se convirtió en un hombre de consulta, pero protagonizó las mayores crisis económicas del país. Fue parte del equipo económico de la dictadura militar. Y después, en los noventa, fue el padre de la convertibilidad, que llevó a la Argentina a la peor de sus crisis en toda la historia”.
“Cuando hablaba de la convertibilidad, Cavallo siempre decía: ‘en esto, estamos de acuerdo todos los economistas. El que no está de acuerdo tiene muchos problemas conceptuales’. La carrera te formaba en una sola corriente de pensamiento que era la escuela principal”, añadió el mandatario.
También tocó la arista de los fondos buitres y el problema con el fallo contra YPF: “El problema con YPF no fue recuperarla, el problema fue que la vaciaron con todos los cómplices son los que hoy se están quejando de que la recuperamos. Más allá de muchísimas consideraciones posteriores. Lo mismo pasa con Vaca Muerta. Estuviese bien muerta si Cristina Kirchner no la hubiese recuperado”.
“Enseñar economía de forma distinta no es enseñando solamente una teoría, ni siquiera la que nosotros estábamos de acuerdo. La idea era enseñar todas las escuelas de pensamiento económico, no una sola”, continuó.
Allí reivindicó a la universidad pública y al Conicet: “La idea fue cambiar el enfoque, a uno que no sea de una sola escuela, sino un pensamiento plural. Un pluralismo académico y científico, donde se estudien varias teorías. Después, que buena parte de la carrera tenga los problemas específicamente latinoamericanos y nacionales”.
Sobre las críticas de la derecha a los temas estudiados por la ciencia argentina, Kicillof manifestó: “Cuando se cuestiona que en el conicet se enseña ciencias sociales, lo único que sirve serían las ciencias naturales y particularmente aplicadas. No servirían las ciencias sociales ni las humanas. Entonces cómo se va a estudiar eso. La pregunta es, si uno quiere formar a nuestra sociedad como gente que piense, el único lugar posible para que suceda es la universidad pública”.
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