Intendente, legisladores y concejales del PJ rechazaron los despidos en Bunge

El despido de 84 trabajadores por parte de la aceitera Bungue sumó numerosos repudios que trasvasaron las fornteras de Ramallo.

En primer lugar, el Intendente del PJ, Mauro Poletti, anunció que elevará al Concejo Deliberante un proyecto de ordenanza para aumentar las tasas a aquellos que injustificada y arbitrariamente despidan empleados en el Partido de Ramallo.

La medida tiene como objetivo evitar la ola de despidos que están afectando al Partido de Ramallo.

“Queremos comunicarles una iniciativa que hemos estado trabajando, vamos a elevar al Concejo Deliberante un proyecto de ordenanza para que se convoque a mayores contribuyentes y se pueda incorporar a la fiscal impositiva con el objeto de sancionar una ordenanza para penar con un aumento de tasas a aquellas empresas que en forma injustificada o arbitraria procedan a modificar en menos su base tributaria”, comentó Poletti.

Y continuó: “las empresas en el Partido de Ramallo tributan por la cantidad de empleados que tienen (esa es su base tributaria), si nosotros vemos que alguna compañía que no está en situación de crisis o de quiebra, procede a despedir empleados de aquí para adelante -retroactivo al 1 de julio- vamos a incorporar penas de aumentos de tasas proteger a los trabajadores del Partido de Ramallo".

Poletti expresó, además, su sorpresa al sostener que "cuesta creer que la empresa Bunge esté teniendo crisis alguna, ya que es uno de los pocos sectores que se ha beneficiado con estas políticas económicas que se están llevando a cabo por parte del gobierno nacional".

“Nosotros no vamos a ser cómplices ni por acción  ni por omisión, no vamos a permanecer en una posición pasiva toda vez que se avance contra el derecho de los trabajadores”, sostuvo Poletti.

En la misma línea, senadores de Unidad Ciudadana expresaron su repudio a laa decisión tomada por al empresa privada. Tras conocerse la decisión, la legisladora  Cecilia Comerio rechazó la medida y exigió a las autoridades de la cartera laboral nacional y provincial que intervengan de inmediato en el conflicto.

“Estamos muy preocupados por los despidos en Bunge, y por eso estamos acompañando a los trabajadores y siguiendo muy de cerca el tema con los concejales de Ramallo. Hablamos de despidos en un sector que fue muy favorecido por las políticas oficiales, y sin embargo esta empresa no tiene pruritos a la hora de dejar en la calle a un centenar de familias en un momento muy difícil, en plena crisis económica y con la inflación descontrolada” aseguró la legisladora. 

“Las autoridades de las áreas de trabajo nacional y provincial tienen que dejar de mirar para el costado y ponerse a trabajar en serio para darle respuesta a los trabajadores” exigió.