En picada: cae la imagen positiva de Milei y crece la incertidumbre de la ciudadanía

A raíz de las políticas de ajuste que lleva adelante el gobierno nacional de Javier Milei, la ciudadanía empieza a manifestar su descontento y preocupación con la situación económica nacional. Los aumentos en el transporte y las futuras subas en las tarifas de gas y luz son un real problema para toda la población, que se ve reflejado en la caída de la imagen positiva del Jefe de Estado.

Es por esto que la consultora Circuitos lanzó un nuevo estudio de opinión sobre la imagen del presidente Javier Milei y la postura de los encuestados en torno a la situación económica en la actualidad. En esa línea, cada vez es mayor el descontento con el mandatario nacional, y crece la preocupación en la ciudadanía por no llegar a fin de mes.

Según el relevamiento de la encuesta, un 34.4% de los encuestados cree que la imagen del presidente es “muy mala”. En sintonía, el 10.4% optó por la opción “mala”. Mientras que un 25.9% tiene una “muy buena” imagen del actual mandatario. En comparativa con el mes anterior, aumentó en un 6.3% el posicionamiento negativo.



Con respecto a la confianza de los encuestados, prevalece la opción negativa entre los ciudadanos sondeados. Un 37.9% desconfía de Javier Milei, mientras que el 36.6% todavía cree en las intenciones del libertario. Con respecto al mes anterior, la confianza en el presidente cayó un 5.9%.



El rubro que mayor caída tuvo fue en las sensaciones de los encuestados. Un 44% tiene esperanzas con el rumbo económico que lleva adelante la actual gestión, pero tuvo una caída del 10% con respecto a enero 2024.



Otra arista que analizó la consultora Circuitos se centró en quién tiene que ser el referente del peronismo en su nuevo rol de opositor a nivel nacional. Un 26.4% cree que tiene que encabezar el excandidato a presidente, Sergio Massa, mientras que un 25.1% sostiene que el referente debe ser el gobernador bonaerense, Axel Kicillof.



Sorprende el crecimiento de Guillermo Moreno, quien cosechó un 12.9% de aceptación, un 0.6% más que Cristina Fernández de Kirchner.