Según las estadísticas de La actual cifra, incluso se encuentra muy por debajo de los 58 kilos que se llegaron a consumir en 2002, producto de la crisis económica desatada post devaluación de la moneda. Las estadísticas oficiales que se remontan a 1990 detallan que en ese año el consumo alcanzaba el récord de 78,23 kilos. Así, se desprende que en los últimos 29 años los argentinos perdieron en el camino algo así como un kilo de carne vacuna al año o 29 kilos en total. Ahora, si bien es cierto es que en los últimos años hubo una fuerte crecimiento en el consumo de carne de pollo y de cerdo, el fuerte incremento que viene mostrando la carne vacuna en el mostrador tiene mucho que ver con esta estrepitosa caída. Las últimas estadísticas del Instituto de Promoción de Por supuesto que la carne vacuna no es la única que tuvo una suba exponencial, la de pollo a marzo de este año mostró un crecimiento anual del 89,4% y la de cerdo del 46,3%. |