Municipios
30 de mayo de 2014
ELECCIONES
La Plata: ¿Loca carrera?, largada 2015
En la capital bonaerense hay muchos pilotos y escuderías, pero no todas con la puesta a punto para el año próximo. Especulaciones de la hora, nombres y apellidos
Siempre se anotan muchos más de los que finalmente van a competir o van a llegar a largar. Es tiempo de preclasificación en la Octava de cara al 2015, cuando, además de jefe comunal, se renovarán los tres senadores en la Legislatura. Pilotos y escuderías sobran. Es probable que gran parte de ellas no tengan la puesta a punto en las PASO, pero, por ahora, se anotan.
El peronismo platense tiene más patas que un ciempiés. El oficialismo hoy es Pablo Bruera, junto con su hermano, Valeria Amendolara y un grupo de concejales que, salvo excepciones, no tiene grandes ambiciones. El mayor vínculo con la Casa Rosada es a través del edil Germán Beltrano, hombre de Parrilli y cercano a Julián Domínguez.
En el peronismo que la semana pasada acompañó el voto de la Rendición de Cuentas (14 sobre 24) está también el ultrakirchnerismo. Hoy, el principal hombre de La Cámpora es el concejal Martín Alaniz. Pero son muchos los que nombran a la decana Santiout con mejor posicionamiento. Ambos forman parte del mismo barco, pero con capitanes distintos. El nexo con Máximo es Alaniz. El alakismo residual de Sebastián Tangorra, ausente en dicha sesión, vive algo así como el proceso hacia ya no ser.
Scioli no se jugó con nadie. Arma Alberto Pérez en la Octava, pero “Pepe” Scioli abrazó y lanzó a Gonzalo Atanasof, aunque nada es definitivo aún. Al Gobernador se le cayeron candidatos que parecían con chances, como Nora de Lucía, desgastada por la función en Educación. Hoy, oficialmente, su hombre es Bruera. Aunque esto tampoco está firmado ante escribano.
El peronismo de Mariotto lanzó tempranamente al senador Emilio López Muntaner, pero sin el respaldo explícito de los otros dos legisladores del oficialismo. Es una apuesta, obvio.
El massismo es un hervidero. Los votos de Pachiarotti (previsible) y Jazmín a la Rendición de Cuentas magnificaron las diferencias en el espacio. Hay muchos referentes, pero pocos jefes. Arteaga fue el más votado, y quiere ser. Del otro lado, Melzi y Jazmín creen que encaran la renovación. Ya se enfrentaron y son espacios en pugna, con Chubi Leguizamón que hace equilibrio. Sarghini, jefe del bloque en Diputados y acaso uno de los técnicos más respetados, se muestra ajeno de las rispideces de la hora, pero nadie lo ve como candidato.
El Fapunen tampoco tiene “un” referente. Ni siquiera cada espacio lo tiene. La UCR sigue con la histórica rencilla. Hoy el diputado Miguel Bazze no cuenta con un hombre bien posicionado. Además, sabe que Sergio Panella divide. De hecho, ya perdió. Pero maneja la orgánica. El espacio de Sanz arma con el académico Raúl Cadaá, pero siempre sin salir de un ambiente de diálogo. Tampoco es homogéneo el sector de Binner-Stolbizer, con el concejal Crespo y el diputado Juan Cocino como mayores exponentes. Salvo excepciones, son muy pocos los instalados y conocidos, pero muchos los que quieren ser.