Rusia declaró organización extremista al movimiento LGTB

El juez Supremo ruso Oleg Nefedov falló a favor de la reclamación que hizo el Ministerio de Justicia que consideró, hace un par de semanas, que dicho movimiento viola las leyes que penalizan el extremismo y el odio social religioso. 

La medida tiene un efecto “inmediato” y prohíbe la propaganda, la publicidad, el generar interés y animas a integrar las filas del movimiento social que lucha contra la discriminación y el reconocimiento de derechos de las personas lesbianas, gays, bisexuales, transgénero y transexuales (LGTB). 

Por su parte el comunicado de la justicia rusa afirma que dicho fallo “no afecta el derecho de los ciudadanos a la vida privada”, porque la homosexualidad dejó de ser un delito en el país en el año 1993. 

Organizaciones de derechos humanos rusas al enterarse se presentaron reclamando al Supremo que no reconociera al movimiento como extremista, afirmando que es imposible considerar un movimiento cívico a una serie de personas que pertenecen a un grupo social que se unen por cualidades personales concretas. Los activistas acusaron al Estado Ruso de querer “controlar las creencias”.