Después del escándalo que inició este fin de semana luego de que Wanda Nara descubriera mensajes que se envió con Mauro Icardi, la China Suárez rompió el silencio y, a través de una extensa carta que publicó en su cuenta de Instagram, expresó un descargo.
"Escribo esta carta para bajar el ruido externo de mentiras, maltratos y miradas inclinadas en la construcción de historias manipuladas para, una vez más, ser el chivo expiatorio de la violencia mediática", arrancó la actriz. "He guardado por mucho tiempo silencio por varias razones, la principal por miedo e inexperiencia. Por no saber cómo nombrar el nivel de mentiras y atrocidades que se dicen para sustentar el minuto a minuto televisivo", continuó.
"Lo que está sucediendo hoy tiene detrás una historia mucho más grande y profunda, de la que seguramente muchas mujeres van a sentirse identificadas. Me ha tocado relacionarme con hombres a los que les he creído siempre sus palabras: que estaban separados o separándose y que no había conflictos", aclaró, con respecto a la situación con el futbolista y con ex parejas.
"Siento que esto es un Deja Vu infernal, donde vuelvo a pagar con mi reputación cuestiones que son del dominio personal de cualquier mujer. Una repetición que deja a la luz mi inexperiencia y sobre todo profunda credibilidad que le di a estos hombres que luego guardaron silencio dejando que me comieran los lobos", apuntó. "Parece que es más creíble para esta sociedad, sabiendo cómo se manejan ellos siempre, que yo sea la mala, la que engaña y no la engañada", se defendió, ante las acusaciones de ser la responsable de "destruir hogares".
Indignada por la violencia recibida, siguió con su descargo. "Y también parece que es más fácil para una mujer pegarme a mi, para descargar. El costo de sostener la imagen de una familia feliz lo pago yo, no el hombre que fue irracional o tuvo un desliz. En ese precio todos quedan bien parados. Repito mi silencio constante para preservar mis vínculos familiares que han sido siempre mi prioridad, me jugó en contra. Pero hoy no quiero callar más, porque se que somos muchas mujeres a las que esto nos ha sucedido y a la que la mirada externa juzga".
A su vez, amplió detalles del intercambio que tuvo con el futbolista del PSG. "Lo que sucedió es una situación que no comencé, no alenté y no provoqué. Tener que contar esto también habla de la poca privacidad que tenemos las mujeres. Mientras tanto, un montón de calificativos dañinos pidiendo mi cabeza desde hace tiempo, en donde el peso de como se me juzga es absolutamente asimétrico. Caso contrario se sabría que yo no fui quien insistió y propició esta situación", aclaró, al tiempo que aseguró que no se hará más cargo por las veces que, tanto ella como otras mujeres fueron "usadas y juzgadas", por las actitudes de "conquistadores seriales que tienen aprendidas estos varones y que después bien saben esconder". Además, la actriz admitió estar "empoderada" a la hora de romper el silencio.
Por último, con respecto a la violencia que recibió por parte de otras mujeres, expresó que "es el reflejo que una sociedad entera usó (y sigue usando) para referirse a ellas", y que pone a todas en el mismo lugar. Además, advirtió que tomará acciones legales contra quienes sigan "lucrando a costa de mi vida personal y mi carrera artística".
Al cierre de la extensa carta, la actriz agradeció las muestras de apoyo recibidas y aclaró que: "soy una mujer que ya no tiene miedo de hacer valor mi derecho a vivir libre de prejuicios. Y ojalá esto no sirva solo como un descargo, sino también para reflexionar entre nosotras".
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