La Tecla
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Mientras el conflicto paritario se mantiene en compás de espera hasta la audiencia del jueves en el Ministerio de Trabajo en La Plata y los servicios que brinda la Municipalidad siguen reducidos, el mismísimo intendente Carlos Arroyo encabezó ayer por la noche un operativo de control de alcoholemia en la zona sur de la ciudad.
Una profunda sorpresa les generó a los vecinos que ayer pasaron por la zona del ingreso al barrio El Alfar, donde los coches eran detenidos por el jefe comunal, acompañado apenas por un reducido número de inspectores y por perros entrenados.
Según trascendió, el intendente explicó que estaba tratando de garantizar el funcionamiento de los controles ante la retención de tareas que afecta al funcionamiento de la administración y los servicios municipales.
En el transcurso de la semana, Arroyo había adelantado que llevaría adelante estos controles ya que “soy un servidor público”. Si bien no es la primera vez que al intendente se lo ve en horas nocturnas formando parte de un operativo, en esta ocasión la particularidad está puesta en el delicado contexto de las medidas de fuerza dispuesta por el Sindicato de Trabajadores Municipales.
Fuente: La Tecla Mar del Plata