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Política Provincial
29 de agosto de 2018
ROSCA PERONISTA
La estrategia de Randazzo para volver a ser una piedra en el zapato
“El Flaco”, lleva varios años en un silencio que sólo interrumpió para marcar una línea diferencial al kirchnerismo y los intendentes del PJ bonaerense en 2017. Retomó su negociación desde las sombras y planea reaparecer en 2019, pero con una opción que no es la que más adhesiones cosecha.
Poco ha dicho Florencio Randazzo en los últimos ocho meses. Incluso, su última aparición en la escena política no fue ni pública, ni mediática. Fue en las redes sociales, más precisamente en Twitter. El 20 de enero, respondió a José Luis Gioja, quien proclamaba una gran PASO en 2019, para achacar que las primarias no se usaron en 2017, algo que Randazzo sufrió, y le costó una dura derrota electoral en las generales.
“Ir a las PASO es lo que propusimos nosotros en 2017. Pero el silencio de quienes conducían el PJ legitimó la clausura de las Primarias y la formación de otro partido. Eso posibilitó que ganara Cambiemos. Ojalá en 2019 no ocurra lo mismo y podamos tener un presidente peronista”, fue el mensaje del Flaco. Achaca a otros la derrota del peronismo cuando fue su insistencia en quedarse dentro de la cancha pese a la caída en las Paso la que habría favorecido al oficialismo.
El mismo silencio que pregona desde entonces el exministro de Cristina Fernández de Kirchner, fue el que eligió desde diciembre de 2015 hasta meses antes de las definiciones de candidaturas a legislador. En aquel momento, varios analistas políticos consideraron que su aparición en la escena para presentar una línea paralela a Unidad Ciudadana, que contaba con el respaldo del PJ bonaerense y los intendentes, acabó por ser servil al triunfo de Cambiemos.
Con ese antecedente fresco, más el nuevo silencio –al igual que la gran parte de 2016-, todo indica que Randazzo volverá a tener un rol particular en la discusión política.
Es que, según pudo saber
En ese sentido, el armado al que apuesta a consolidar abre las puertas a negociaciones que ya cortaron los lazos con el kirchnerismo hace algún tiempo. Entre ellos, el Frente Renovador y lo que queda del Movimiento Evita pican en punta.
Lo llamativo es que, a diferencia de lo ocurrido en 2015 cuando Randazzo declinó la posibilidad de ser el candidato a gobernador del Frente para
Con las intenciones de Pichetto de ir por la presidencia o de impulsar una PASO con nombres como Sergio Uñac, Sergio Massa y Juan Manuel Urtubey, el nombre de Randazzo baja a
Desde su entorno, aseveran que si bien es un participante diario de la rosca del otro peronismo por el momento no habló de candidaturas. No obstante, las fichas apuntan a ser una de las variables para el sillón que hoy ocupa María Eugenia Vidal.
Así, mientras mantiene el silencio desde hace varios meses y profundiza la decisión tomada en diciembre de 2015, Randazzo mueve las fichas para volver a ser una piedra en el zapato en 2019. Desde el kirchnerismo no dejan de ver al sector de Pichetto como funcional a los intereses de Cambiemos, que para tener chances de volver a ganar neceita la atomización del peronismo y sus satélites.