Intendente de la Cuarta echó a dos funcionarios y los dejó “en manos de la Justicia”

La última semana de enero comenzó movida en el distrito de la cuarta sección electoral. Fue luego de que concejales opositores denunciaran que el secretario de Servicios Públicos, Juan "Pipo" Gómez y su segundo, Gabriel Vespaciano, inscribieron como proveedor de pintura del municipio a un allegado que facturó casi tres millones de pesos y que nada tendría que ver con el rubro.

Según lo expuesto, el dinero volvía a los funcionarios en efectivo y en negro, pero lo que destapó y sacó a la luz la maniobra fue una transferencia hecha por el proveedor directamente a la cuenta de los funcionarios luego de cobrar un cheque.

Tras tomar conocimiento de ello, el jefe comunal Víctor Aiola tomó cartas en el asunto rápidamente y separó de su cargo a los dos acusados.

“Esta mañana radicamos la denuncia en la fiscalía. Nosotros bregamos por hacer las cosas bien y ante la sospecha de una irregularidad lo primero que hacemos es separar a los funcionarios de su cargo y ponerlos en manos de la Justicia. Creemos que es lo correcto y lo que se debería hacer siempre que haya algún grado de irregularidad”, expresó el radical en diálogo con La Tecla.

Las supuestas irregularidades salieron a la luz la semana pasada y fueron expuestas públicamente en la última sesión celebrada en el recinto local, que tuvo lugar esta mañana, donde también se trató el proyecto de Presupuesto 2023 enviado por el Ejecutivo local.

"La información nos llegó a nuestro bloque, la estuvimos verificando y comprobamos que claramente estamos ante un hecho de corrupción. La corrupción siempre es muy difícil de demostrar porque no deja huellas, pero este no es el caso", señaló el presidente del bloque del Frente de Todos, Javier Estévez, en comunicación con el medio Chacabuco en Red.