Vía La Tecla Mar del Plata
Marina Sánchez Herrero (UCR) cumple un año como presidenta del Legislativo, en lo que supone una función novedosa tras su paso como integrante del Consejo de la Magistratura, en representación de los abogados del interior.
En diálogo con La Tecla, la titular del Honorable Concejo Deliberante (HCD) plantea los desafíos inmediatos del cuerpo en medio de la discusión del Presupuesto, descarta que las elecciones puedan afectar a la labor legislativa y profundiza sobre el vínculo con la ciudadanía y la necesidad de modernizar la administración pública.
-¿Qué balance hace del período legislativo, a un año de asumir la presidencia del cuerpo?
-Ha sido un año en el que se ha sesionado regularmente, donde todas las comisiones han trabajado y se han debatido temas importantes para la ciudad, con instrumentos legislativos necesarios para que el intendente municipal pueda llevar a cabo muchas de las políticas públicas que ha planteado en materia de seguridad. Desde el punto de vista del funcionamiento, el balance es positivo. Luego sucedió todo lo propio de las distintas miradas partidarias dentro del Concejo.
-¿Qué le sorprendió de la función legislativa en este año al frente del HCD? ¿Hubo algo que no esperaba?
-La presidencia me permitió conocer muchos actores de la sociedad, personas, vecinos, ciudadanos, con los que pude intercambiar experiencias, mostrándome la realidad desde sus ojos. Eso me sumó mucho a la gestión, porque ya no gestioné lo que yo consideré que ese ciudadano o sector necesitaba, sino que lo hice en la medida que ellos me transmitieron que necesitaban. Fue un trabajo conjunto. En lo que más pude avanzar desde mi lugar fue en tener una visión real de las necesidades y trabajar en ese sentido. Poder acceder en primera persona a esas miradas de lo que viven y necesitan todos los actores fue lo que más me sumó.
-Se extendió el período legislativo: ¿Obedece a que la intención es aprobar el Presupuesto 2023 antes de fin de año?
-El período legislativo se prorrogó porque había temas que eran necesarios seguir tratando. En ocasión de que el Presupuesto estaba presentado nos pareció que trabajar durante diciembre en lo que tenemos pendiente más el Presupuesto era lo que correspondía.
-¿Pero están dadas las condiciones para que se apruebe el Presupuesto este mes?
-No puedo saber hoy cómo van a votar todos los bloques, lo que sí te puedo decir es que se está trabajando en un cronograma para intentar sacarlo en diciembre o en los primeros días de enero. Pero eso también es, en parte, dar por cierto algunas votaciones que hoy no conozco.
-¿Y qué otros temas pendientes hay por tratar en este mes?
-En general, cosas que vienen ya presentadas desde hace unos meses. El Concejo nunca para. Todas las comisiones van a seguir funcionando en enero, febrero. Esta es una ciudad turística, así que tenemos que estar trabajando de manera permanente para todas las necesidades que surjan en el momento. El Concejo Deliberante siempre está trabajando los doce meses del año.
-¿Qué otros temas cruciales avizora de cara a 2023, un año atravesado por las elecciones?
-Las elecciones no deben afectar a la función legislativa; es lo que corresponde, somos representantes de los ciudadanos. Ellos necesitan que trabajemos en ese sentido. Cualquier persona que esté dentro del Concejo abocada a la cuestión electoral debe hacerlo sin entorpecer su labor legislativa. El objetivo en la mira es avanzar con todos los proyectos que le hacen bien a Mar del Plata, como plantea el intendente (Guillermo) Montenegro. ¿Es un año electoral? Sí, pero requiere de un redoble de esfuerzos de quienes estamos en estos ámbitos. De ninguna manera puede ser una traba en la tarea del Concejo Deliberante.
Política y sociedad: la visión "exigente" del ciudadano
-¿Qué mirada tiene sobre la relación de la política con la sociedad y el común de la gente, con quienes no están en el microclima? Se habla de una distancia cada vez más grande entre la dirigencia y la ciudadanía.
-El ciudadano está muy informado, esto ha generado un cambio de conversación dentro de la sociedad. Hay una hiperinformación. Esto ha llevado a que no existe más ese dirigente tradicional que te dice lo que piensa y uno toma conocimiento solo a partir de ese hecho. Esto redefine el lugar del ciudadano dentro de lo que es la toma de decisión. Hoy tiene determinados elementos en los que tiene una mirada mucho más exigente respecto a las necesidades. No hablamos de las necesidades personales, sus conflictivades, sino que se informa sobre otro tipo de decisiones. El ciudadano está pidiendo que se lo escuche. No es un sujeto pasivo, no quiere serlo.
Despapelización: "Es un concepto de gestión"
-El HCD impulsa una reforma en el reglamento interno en busca de la modernización. ¿En qué consiste?
-Despapelizar y digitalizar es un concepto de gestión que tiene que ver con la transparencia y, básicamente, la eficiencia y la eficacia. También tiene que ver con todo el procedimiento interno del Legislativo, pero aun en ese concepto se le da una mayor agilidad a todo lo que son los procedimientos. A eso hay que agregarle algo no menor, que es ecológicamente sustentable dejar de usar papel. Presupuestariamente es beneficioso. También se repiensa el tipo de espacio y mobiliario. Cuando terminemos el proceso de digitalización habrá muebles que no vamos a necesitar, como el mueble de archivos.
Tecnología y seguridad
-Tuvo un reciente viaje a EE.UU en el que planteó la posibilidad de retomar medidas de seguridad que se impulsan en Washington. ¿Qué cuestiones podrían replicarse en Mar del Plata?
-Fue muy fructífero poder conocer cómo funciona el Concejo Deliberante allá, encontrarme con mi par. Me comentó sobre un proyecto que tiene que ver con la protección ciudadana. Es un programa que usa radares o ámbitos donde se emiten señales a un centro de control, como el COM (Centro de Operaciones y Monitoreo) ante gritos, ruidos, balazos. Eso optimiza el trabajo de las fuerzas de seguridad. La tecnología es lo omnipresente: se establece la amenaza que la pone en funcionamiento y, a partir de ahí, reaccionan los mecanismos del Estado.
La pelota, una pasión presente en tiempos de Qatar
-¿Es futbolera? ¿Cómo vive el mundial?
-Ya tengo otra edad distinta y lo vivo diferente. Veo el mundial cuando juega Argentina, me emociono y luego sigo trabajando, como corresponde, pero por una cuestión de edad.
-¿Y en su juventud era de ir a la cancha?
-Sí, por supuesto, soy hincha de Boca y fui varias veces a la Bombonera. Soy una rosarina rara. Mi abuelo era de Carmen de Areco, de provincia de Buenos Aires, tuvo dos hijas mujeres a las que hizo fanáticas de Boca. Somos una familia de grandes pasiones.
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