Como se ha señalado a lo largo de los últimos días, las conversaciones entre el oficialismo y la oposición para el tratamiento del Presupuesto y la Ley Impositiva 2022 tiene algunas cuestiones sin resolver en cuanto a esas leyes en lo particular; pero también hay otra discusión, más fuerte y más lejana en el consenso, que involucra cuestiones extrapresupuestarias. Y eso, a estas horas, traba más el tratamiento que la Ley de Leyes en sí.
La visita a la Legislatura de los ministros Pablo López (Hacienda), Julio Alak (Justicia) y Augusto Costa (Producción), que se producirán entre lunes y martes de la semana entrante, posiblemente terminen por cerrar las disputas en torno a lo que pretenden los legisladores e intendentes de Juntos y lo que busca el Frente de Todos en la defensa del texto original. Si bien desde la oposición también piden explicaciones del ministro de Infraestructura, Leonardo Nardini, y eventualmente del responsable de la Seguridad, Sergio Berni, es probable que la ronda de consultas se cierre con López, Alak y Costa. Es, al menos, lo que pretende el Gobierno.
Y si alcanza con ellos para cerrar el Fondo de Infraestructura Municipal, el reparto de algunas obras, precisiones sobre la ejecución presupuestaria de este año y la condonación o postergación de la deuda de los municipios con la Provincia por el Fondo Covid, la oposición cerrará el debate ahí.
Pero con eso no alcanza para garantizar el éxito en el recinto y que Kicillof tenga el próximo 28 de diciembre lo que Alberto Fernández no pudo tener hoy. Para que el Presupuesto sea votado el oficialismo deberá ceder a una vieja demanda: la de los cargos en los organismos de control y en el directorio de las empresas, que le debe a la oposición desde que asumió la actual gestión, hace dos años.
Y ese paquete se hace cada vez más grande. Lo que en principio eran los directorios de las empresas estatales y cuatro sillas en la conducción del Banco Provincia ahora son seis lugares en el Directorio del Banco (que este mes volvería a quedar sin quórum), los lugares en las empresas, tres jueces de la Suprema Corte, el presidente del Tribunal de Cuentas (que deberá votarse después porque Eduardo Grinberg se retira el 28 de febrero), la Defensoría del Pueblo y la Contaduría y Subcontaduría de la Provincia.
Por ejemplo, de todo ese combo, Juntos pretende unos 35 lugares, que incluyen cuatro directores del Banco Provincia (el oficialismo quiere entregar dos), el Contador y Subcontador, el Tribunal de Cuentas, la Defensoría y consensuar los magistrados del Máximo Tribunal de Justicia bonaerense. Podrá ceder algunas de esas pretensiones en la puja, pero pretende quedarse con un alto porcentaje.
Las conversaciones por esos espacios están iniciadas y según una fuente de Juntos, en algunos casos “encaminadas”. Sin embargo, Kicillof es reticente a ceder algunos lugares. Sin ir más lejos, el Gobernador tiene candidato para el Tribunal de Cuentas: el actual Secretario General de la Gobernación, Federico Thea, quien ya se anunció que será reemplazado en ese cargo por Agustina Vila, actual Directora General de Cultura y Educación.
Pero pese a que esto ya parece mucho como para acordar en poco más de una semana, se agrega el condimento ultra picante de la re-re de los intendentes. Una discusión que atraviesa a las dos fuerzas mayoritarias, donde hay posturas muy disímiles por consensuar. Ya no hay secretos, y a la demanda de los intendentes peronistas de tener al menos una chance más para quedarse al frente de sus comunas, se plegaron los radicales y los jefes comunales del Pro, que hasta ahora se abstenían de jugar sus fichas.
“Los intendentes quieren meter sí o sí la votación de la ley de la re-re en la misma sesión del Presupuesto. Es un paquete completo, todo va a atado y se tiene que cerrar ese paquete”, le aseguró a La Tecla uno de los negociadores por parte de Juntos. En ese contexto debe señalarse que el oficialismo no tiene cerrado el acuerdo interno al respecto, ya que el massismo no quiere acompañar una revisión de la ley 14.836, que puso freno a las reelecciones indefinidas. Mientras, en Juntos, la mesa nacional del Pro se muestra en contrario a lo que dicen los intendentes del espacio. En la UCR parece haber una coordinación mayor y si los demás se ponen de acuerdo acompañarán.
El paquete para que Axel Kicillof tenga Presupuesto y Ley Impositiva 2022 se hace cada vez más voluminoso y se necesita de mucho hilo y pericia política para cerrarlo. Los dirigentes provinciales, tanto del oficialismo como de la oposición, tienen por delante el desafío de llegar a un consenso amplio que permita la votación. Lo que pasó en el Congreso de la Nación es otro problema de cara a la discusión bonaerense.
|
