El presidente Mauricio Macri expresó sus primeras sensaciones, tras el anuncio de la candidatura de Cristina Kirchner como vicepresidenta de Alberto Fernández. El actual mandatario participó este sábado de un evento, en la Ciudad de Buenos Aires, con la presencia de militantes de su espacio, y estuvo acompañado por el Jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta. “Hay que sacar las raíces podridas. Estamos acá porque la oportunidad del cambio no la vamos a desaprovechar”, señaló.
En otro pasaje de su alocución, Macri resaltó que el país está “en el rumbo correcto” y enfatizó la “necesidad de cambiar”, pero evitó hacer referencia explícita a la bendición de CFK a Alberto Fernández. “Es muy importante que hoy estén acá, reafirmando que creemos en lo que estamos haciendo. Nos va a ir mucho mejor. Los necesitamos, los necesito”, rogó el Presidente.
Asimismo, ante la atenta escucha de los presentes, denominados “Defensores del Cambio”, fue concreto en su intención de lograr la continuidad de su espacio en el poder: “Lo único inmutable es el pasado. Volver atrás sería autodestruirnos. Salgamos juntos a la calle, a decir ‘es por acá’, creemos en el sendero elegido”.
Por último, mencionó que "hay enemigos de la ola del cambio: mafiosos, matones, corruptos, mentirosos, burócratas". El mandatario fue en línea con dirigentes de su espacio, como Fernando Iglesias, quien aludió a que la postulación de CFK "tiene directa vinculación con los fueros". En ese sentido, Macri exclamó: "Quieren conservar sus privilegios, agitar para que nada cambie, buscan la oscuridad para esconderse".
Detrás del cortinado, sin embargo, los armadores de la estructura electoral oficialista ya piensan en efectivizar la posibilidad de la apertura del frente, con la probable incorporación de dirigentes de otros núcleos políticos: una idea que cobra cada vez más fuerza en el seno de Cambiemos. |