El sheriff del Condado de Orange, Jerry Demings, confirmó en la tarde del miércoles la muerte del pequeño Lane Graves, así como el hallazgo de sus restos.
Según el funcionario judicial, el menor se encontraba junto a sus padres, Matthew y Melissa Graves, y sus dos hermanos en la orilla de un lago artificial del hotel Disney Grand Floridian Resort and Spa cuando lo atacó el animal.
Al ver lo ocurrido, el padre forcejeó con el caimán para recuperar a su hijo, pero fue en vano y éste termino siendo arrastrado al interior de la laguna, afirmó esa misma fuente en conferencia de prensa.
El animal medía entre 1,2 y 2 metros de largo, añadió, y cree que solo ahogó al niño, pues su cuerpo fue encontrado "completamente intacto".
"Fue difícil decirle a la familia que su hijo está muerto", dijo Demings sobre los padres.
Nick Wiley, director ejecutivo de la Comisión de Conservación de la vida salvaje de Florida, dijo que el parque Disney ha sido "totalmente cooperativo" con la investigación.
Explicó que el parque de diversiones tiene identificado cinco caimanes como los posibles culpables del ataque y que intentarán reconocer al indicado por métodos forenses al que mató al niño. Una vez identificado, lo "removerán", afirmó Wiley sin dar más detalles. "Vamos a asegurarnos de que esto no vuelva a pasar", dijo Wiley, pero anticipó que revisar los protocolos de seguridad llevará tiempo.
De acuerdo a un portavoz, Disney está "consternado" por lo ocurrido. El Grand Floridian Resort and Spa, era el lugar donde la familia del pequeño muerto pasaba sus vacaciones. Se trata de un hotel de lujo situado junto al parque de atracciones de Disney, el Magic Kingdom Park.
En tanto, la presencia de caimanes en Florida abunda. "Son parte fundamental de sus humedales, pantanos, ríos y lagos", subrayaron funcionarios del estado, aunque añadieron que desde 1948 solo han muerto en el estado 22 personas por ataques de caimán. |