10 de agosto de 2012
ANALISIS
Liderazgo mundial que reacciona con lentitud
El titular del Centro de Estudios Nueva Mayoría, Rosendo Fraga, analiza el contexto internacional: “La crisis europea sigue sin resolverse y la dirigencia política parece asumir tiempos muy diferentes a los que requieren los mercados”

(*)Por Rosendo Fraga
La crisis europea sigue sin resolverse y la dirigencia política parece asumir tiempos muy diferentes a los que requieren los mercados. La Corte Constitucional alemana ha dicho que recién a partir del 12 de septiembre decidirá si es o no constitucional que el país participe del Fondo de Estabilización Financiera de Europa, pieza central para el rescate de los países.
A su vez, las reuniones del Eurogrupo para adoptar decisiones sobre la crisis no se reanudarán hasta la primera semana de septiembre, argumentando para ello el receso en el cual entra el parlamento en varios países de la zona euro por el verano del hemisferio norte.
En este marco, la renovada presión de EE.UU. para que se adopten medidas que permitan contener la crisis y recuperar la confianza sólo busca crear clima, al no poder traducirse en decisiones operativas en el corto plazo. El pedido de Grecia de alargar los plazos de sus compromisos queda así pendiente de resolución. Lo mismo sucede con la decisión del rescate a España, en momentos que Rajoy ahora dice que no aceptará más ajustes.
La reunión entre Monti y Hollande sólo adquiere así el sentido de articular un eje crítico de Alemania, pero sin capacidad de resolver los problemas. La situación de Italia se agrava, cayendo la economía por cuarto trimestre consecutivo y diciendo su primer ministro que las divergencias pueden poner en crisis a la Unión Europea. Al mismo tiempo criticó duramente a Alemania, argumentando que está generando resentimiento en su parlamento.
Más allá de algunas señales de que apoyará más medidas del Banco Central Europeo para contener la crisis, lo cierto es que Alemania por ahora no ha adoptado ninguna decisión importante al respecto.
Las mencionadas declaraciones de Monti han generado fuertes críticas en Alemania, donde si bien la opinión pública se muestra pesimista sobre el futuro económico del país, sigue respaldando la postura de Merkel de limitar la participación en los rescates y rechazar los euro-bonos, cuando el Partido Liberal -su principal aliado en la coalición de gobierno- crece en su intención de voto tras manifestar que Grecia debería ser excluida del euro.
Para el gobierno alemán, su país que es sólo un cuarto del PBI europeo, no tiene masa crítica suficiente para hacerse cargo del financiamiento de Europa y en caso de hacerlo puede verse arrastrado por la crisis, arruinando su estabilidad. Para la posición alemana, la crisis europea es el capítulo continental de una crisis global que comenzó en los EE.UU. en 2008 y que todavía no se ha resuelto.
Sólo un respaldo global que incluya a las grandes economías (EE.UU., China, Japón y Alemania) puede resultar eficaz para reestablecer la confianza entorno a los países de la zona euro. Pero ninguna de las grandes potencias se muestra dispuesta a participar en una solución de este tipo, aunque el agravamiento de la crisis europea puede generarles un costo importante.
En este marco, la directora del FMI (Lagarde) volvió a hacer público un discurso pesimista (¿o realista?), insistiendo sobre los problemas de Europa pero diciendo también que no sólo este continente, sino también EE.UU., genera preocupación. Lo dijo dos días antes que se conocieran los datos negativos sobre incremento del desempleo. A ello se agrega que se está desacelerando la economía alemana y Francia enfrenta el riesgo de entrar en recesión.
La guerra civil siria se agrava sin que el mundo articule una solución que contenga el derramamiento de sangre. Las deserciones en las fuerzas de Assad van en aumento, abandonándolo el primer ministro y varios generales en los últimos días. Pero al mismo tiempo sus fuerzas han logrado retomar el control de Damasco y avances importantes en Alepo, la capital económica del país, donde los rebeldes lograron hacerse fuertes y están enfrentando a aviones de combate y tanques.
Los refugiados que han abandonado el país llegarían a los 300.000, cifra equivalente al 1,5% de la población total. El enviado de las UN (Annan), tras reiterados fracasos, ha dado fin a su misión y podría ser reemplazado por el ex canciller español (Moratinos). La Asamblea de esta organización internacional ha condenado nuevamente la represión de las fuerzas de Assad, pero al mismo tiempo también las ejecuciones sumarias que los rebeldes del Ejército de Liberación Sirio (ELS) han realizado en las calles de Alepo.
Cameron fracasó en la gestión realizada ante Putin para que apoye la salida de Assad, al mismo tiempo que este pide con urgencia armas y combustible a Moscú para poder continuar la lucha. El presidente ruso por su parte decidió el envío de tres buques de guerra a Siria, donde Moscú tiene la base para sus operaciones en el Mediterráneo. Por su parte Obama está apoyando al ELS a través de operaciones encubiertas de la CIA, sus voceros dicen que Assad tiene los días contados y el Departamento de Estado y el Pentágono elaboran planes para Siria tras su salida.
Pero el conflicto se está regionalizando en momentos que los efectos de la primavera árabe generan más inestabilidad. En la visita que realizó el Jefe del Pentágono (Panetta) a Israel, el gobierno israelí expresó que la diplomacia no está resultando eficaz para detener el plan nuclear iraní, en el mismo acto en el cual se ratificó la alianza militar entre Washington y Tel Aviv.
Ello tuvo lugar al día siguiente que Obama decidiera ampliar las sanciones contra Irán. Por su parte el gobierno iraní respondió lanzando un misil de corto alcance (300 kilómetros), con un sistema de guiado más preciso que los utilizados hasta ahora, e informando el ministro de Defensa (Vahidi) que éste aumenta la capacidad ofensiva de sus fuerzas frente a las monarquías del Golfo e Israel.
Teherán teme la caída del régimen de Assad, que es su aliado en la región y a través del cual entrega armas a Hezbollah y Hamas. En Siria, el ELS detuvo medio centenar de iraníes que peregrinaban, entre los cuales dijo haber detenido a integrantes de las Guardia Republicana iraní, el cuerpo más aguerrido de Irán. Panetta también visitó Egipto y se entrevistó con el Presidente (Norsi), quien ha designado un gabinete en el cual las Fuerzas Armadas controlan tres ministerios claves (Defensa, Finanzas y Relaciones Exteriores) y también tiene fuerte presencia la Hermandad Musulmana.
Cuatro días después, un grupo islamita extremista dio muerte a 16 guardias fronterizos egipcios y penetró en territorio israelí, donde fue aniquilado por fuerzas de este país. El gobierno egipcio reaccionó con energía, dando muerte a 30 milicianos jihadistas en la zona de la península de Sinaí.
Al mismo tiempo el gobierno de Turquía dice haber dado muerte a más de un centenar de guerrilleros kurdos en los últimos diez días, en Irak en junio han sido muertos en una ofensiva atribuida a Al Qaeda más de 300 personas y heridas otras 600 y en Yemen, en un atentado de esta organización, fueron muertos cincuenta integrantes de una tribu que colabora con el Ejército.
En conclusión: el liderazgo europeo reacciona con lentitud frente a una crisis en la cual los mercados se mueven con mucha mayor velocidad; las diferencias entre los países amenazados y Alemania se profundizan, cuando ésta sostiene que una solución sólo será eficaz si participan las potencias extra-continentales; similar inacción evidencia la UN frente a la guerra civil de Siria, la que se agrava día a día sin que Washington y Moscú logren ponerse de acuerdo para contenerla; por último, el conflicto sirio se va regionalizando en momentos que aumenta la tensión en Israel, Egipto, Turquía, Irán, Irak y Yemen.
(*) Titular del Centro de Estudios Nueva Mayoría