Karina Jelinek fue la protagonista de un confuso episodio que tuvo lugar el último fin de semana en Nordelta. Un invitado de la vedette, que había ido a su casa, rompió la valla de entrada al barrio y agredió a dos empleados de seguridad. Por lo tanto, ella terminó en la comisaría y este mediodía explicó lo que sucedió el domingo por la noche. En diálogo con Involucrados, la morocha confesó: “Fue un amigo de una amiga mía. Supuestamente era un chico bien. Hizo el asado, aportó algo para el asado, después se arrepintió y se fue corriendo con el auto. Él rompió la barrera con el auto, no sé qué tomó que se enloqueció y se fue”. En ese sentido, puntualizó que el hecho la sorprendió porque en el evento “había muchos niños” y supuestamente el hombre de 36 años quería “algo con ella”. Haciendo referencia al disgusto qué pasó, la modelo admitió que “los vecinos se quejamos mucho y me hizo quedar muy mal en el barrio”. Del mismo modo, resaltó que lo que le sucedió “le puede pasar a cualquiera” porque ella no conocía al invitado personalmente hasta el domingo pasado. Para finalizar su descargo, donde recordó que no es la primera vez que los habitantes del barrio Cabos del Lago se quejan por ruidos molestos, afirmó que el inconveniente le dejó una enseñanza: “Un amigo, que te dicen que es de confianza y me pasó esto. Pido disculpas y prometo que no va a volver a suceder”. |