2 de agosto de 2011
POLEMICA EN EL DISTRITO
Una historia de inseguridad, tasas y caja
El municipio de Zárate insistirá con el proyecto de crear una impuesto que permita financiar las políticas municipales que se llevan a cabo en materia de seguridad. Esto generó un fuerte malestar en la oposición quienes sostienen que una medida de estas características significa “hacer una cosa ilegal”
En el municipio que conduce Osvaldo Caffaro todo está bastante revolucionado a partir de la iniciativa del ejecutivo de impulsar una nueva tasa de “seguridad”. Así lo confirmó el secretario de Gobierno, Ariel Ríos, quien sostuvo que el intendente insistirá en la presentación del proyecto de ordenanza que crea una tasa que permita financiar las políticas municipales que se llevan a cabo en materia de seguridad.
“Vamos reiterar el pedido que hicimos tiempo atrás y esperamos que el Concejo Deliberante así lo tome” comunicó el funcionario municipal. Además, agregó que “los móviles están y van a necesitar combustible, vamos a tener que hacernos cargo de eso, así que ante esa situación de gastos vamos a necesitar una tasa de seguridad”.
Desde la oposición salieron duro a cuestionar la iniciativa: “el intendente municipal quiere hacer una cosa ilegal, que es crear una tasa de seguridad, porque es la provincia de Buenos Aires la que tiene que tener el poder de la fuerza según la Constitución Nacional y Provincial, y por lo tanto es quien nos cobra impuestos para en este caso mantener la Policía de la Provincia, los Servicios Penitenciarios bonaerenses” afirmaron desde la oposición.
El Partido Justicialista, a través de uno de sus concejales aseveró que “de ninguna manera la seguridad esta municipalizada, por lo tanto con ese sencillo razonamiento, es lógico que nos opongamos de plano a la creación de una tasa de seguridad del intendente, ya que no es el gobernador y no tiene la comandancia de las fuerzas de seguridad”.
Por su parte, el secretario de Gobierno pidió “no mentirle a los vecinos” y aseguró ”no hay otra forma de llevar adelante este plan si no es con la colaboración de todos”. Además respondió a la oposición alegando que “la seguridad es una potestad exclusiva de la Provincia pero, a pesar de eso, esta gestión no se esconde a la situación y el intendente pone toda la carne al asador”.
Por ahora, la ciudad vive horas de indefinición ya que no se sabe que final tendrá la medida que impulsa el oficialismo y que tanto rechazo causó en la oposición.