7 de agosto de 2025
INCERTIDUMBRE
Una acerera del interior apaga sus hornos indefinidamente y deja en vilo a todo un distrito
La siderúrgica Acerbrag, ubicada en el Parque Industrial de Bragado, anunció la paralización de su producción por tiempo indefinido y justificó la decisión por la caída de las ventas y la crisis industrial actual que atraviesa el país. La planta emplea a 600 trabajadores que podrían perder sus empleos.

La empresa siderúrgica Acerbrag, la mayor fuente de empleo privado en Bragado con 600 trabajadores, volvió a suspender por completo sus operaciones. A diferencia de otras ocasiones, esta detención es por tiempo indefinido y no se trata de una parada técnica programada. La decisión de la firma, que generó una fuerte malestar entre los empleados y la comunidad local, se atribuyó a una caída en las ventas y a la sostenida crisis industrial que afecta al sector siderúrgico en su conjunto.
La noticia fue confirmada por la propia empresa, ubicada en el Parque Industrial de Bragado, y su anuncio tuvo un fuerte impacto en la localidad, tanto por su impacto directo con 600 puestos de trabajo en riesgo, como en su impacto indirecto en la economía de la región. Si bien se estima que el parate durará al menos dos semanas, la falta de una fecha concreta de reinicio genera una profunda incertidumbre, ya que en el pasado ya se habían registrado otras interrupciones de la producción. En febrero de este año, la planta detuvo sus áreas de laminación y acería hasta el mes de marzo, señalando también la baja demanda como motivo principal. Ahora, la situación se repite, pero sin un plazo claro.
La crisis en Acerbrag no es un caso aislado. Se suma a la de otras grandes firmas del sector como Ternium, Tenaris y Acindar, en un contexto donde la industria siderúrgica, que abastece a sectores clave como la construcción, el agro, la industria automotriz y la línea blanca, se ve fuertemente afectada por la actual política económica del gobierno de Javier Milei.
La paralización de la obra pública y la desaceleración de la obra privada son factores que impactan directamente en la demanda de los productos de la empresa, como mallas y hierros para estructuras. Incluso la actividad hidrocarburífera, que venía resistiendo la crisis, comenzó a desacelerarse.
Entre los trabajadores de Acerbrag la situación genera dudas, porque, a pesar de la versión oficial de la empresa, los empleados señalan que la producción de julio fue de 23.000 toneladas, una cifra que consideran «aceptable» para el contexto actual. Esta situación alimentó las sospechas de que el parate busca generar miedo entre el personal, especialmente después de que hace un año se despidiera a 80 operarios y se reincorporara personal de manera paulatina pero bajo condiciones laborales más precarias. “No tiramos manteca al techo, pero para el contexto, no estamos tan mal”, advirtieron los trabajadores a infogremiales.
A la problemática productiva se le suma un complejo escenario salarial. Los trabajadores enfrentan una pulseada compleja, ya que la paritaria de 2024 tardó más de diez meses en negociarse. Si bien ya se acordó la de 2025, todavía está pendiente la homologación oficial por parte de la Secretaría de Trabajo de la Nación, conducida por Julio Cordero, ex abogado del Grupo Techint, lo que añade un elemento más de incertidumbre a la situación laboral.