Vía La Tecla Patagonia
La tensión entre el presidente Javier Milei con los gobernadores viene de arrastre hace algunos meses, pero ayer dio la impresión de llegar quizá a su punto máximo.
Todo comenzó a partir de un pedido del gobernador de Chubut, Ignacio Torres, quien hizo un reclamo a Nación para que libere fondos por $13.500 millones, los cuales, según indicó el mismo, fueron retenidos de forma ilegal y corresponden a más de un tercio de la coparticipación mensual de la Provincia.
Por su postura, Torres recibió el respaldo de todos los gobernadores de la región patagónica, en una evidente muestra de inconformismo respecto a la manera de manejarse por parte del Ejecutivo que conduce Javier Milei.
Pero no solamente los mandatarios de la región apoyaron a Torres, sino también los restantes que tiene Juntos por el Cambio a lo largo y a lo ancho del país, como también así gobernadores de otros colores políticos, lo cual pone en evidencia la tensión que existe hoy entre las partes.
Además, Torres fue respaldo por todo el arco político en general de la Patagonia llámese intendentes, legisladores provinciales, diputados y senadores nacionales.
Con este motivo, La Tecla Patagonia se contactó con el analista político, Lasse Paniceres.
“Más allá de las cuestiones procedimentales legales, habiendo personas que sostienen que el descuento está bien hecho, yo sostengo que, si bien puede ser así, es una decisión política más que legal. Muchas veces estos adelantos vía coparticipación se avisa que se van a descontar. Considero que acá hay una decisión deliberada del Presidente de seguir subiendo la apuesta en el proyecto liberal que quiere hacer, es decir, sin ataduras como sucedió en otros momentos del pasado. Él piensa en un programa político e irá hasta las últimas consecuencias para ejecutarlo. Y a eso hay que sumarle el hecho de que no tiene estructura a nivel nacional”, expresó Paniceres en primer lugar.
“La decisión de Ignacio Torres responde a un abroquelamiento que estaba teniendo la Patagonia de manera incompleta, porque Claudio Vidal no estaba en el Acuerdo y ahora se sumó al mismo. La intención de incorporarse por parte del gobernador de Santa Cruz es interesante porque fue una de las personas visitadas por Milei a comienzos de su gestión, pero terminó tomando su decisión ante el avance por la privatización de la empresa estatal Yacimientos Carboníferos de Río Turbio (YCRT)”, manifestó el analista.
Y continuó: “En este contexto, los gobernadores patagónicos han tenido una unidad muy fuerte. La decisión de Torres tiene cierto anclaje histórico de los gobiernos provinciales contra la Nación, y creo que hace tiempo se viene dando esta batalla. Hubo una advertencia en el sentido de hacer valer el derecho patagónico, siendo la región que más energía provee al país, la segunda que produce minería y creo que lo que se busca es actuar como bloque, algo que nunca se pudo hacer y se está logrando a partir de la presencia de diversas instituciones”.
Por otro lado, declaró en diálogo con este medio: “Más que el odio contra Milei, yo creo que hay un accionar de los gobernadores de hacerse de recursos, bajo el mensaje de que en la región se produce todo el sector primario, secundario y terciario de la economía y la Nación no nos compensa la retribución. Creo que el que tiene la idea de antagonizar es el Presidente: nosotros, los buenos, los de bien; contra la casa que quiere mantener los privilegios y llevar agua para su molino. Considero que el gran enemigo que elige Javier Milei es tener justamente a los mandatarios como contrincantes, quienes están logrando cohesión interna a nivel político y popular”.
“La tensión que hay entre Macri y Milei radica en que el Presidente está buscando hacerse de la estructura del PRO, para así tener un anclaje que le permita dar un salto hacia delante y poder concretar sus reformas. Lo cierto que es que ahora él no va a negociar con el referente amarillo, de modo tal de que a tuvo una experiencia previa en noviembre”, concluyó.
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