La nueva etapa política abierta en el país tiene al presidente, Javier Milei, como la figura que irrumpió con fuerza en un clima de hastío y bronca generalizada de la sociedad para con los gobiernos anteriores. Del otro lado de la vereda, Axel Kicillof se erige como la esperanza del peronismo para retomar la iniciativa tras la derrota electoral y se proyecta hacia el 2027. En un contexto inestable tanto en lo económico como en lo político, la puja por nuevos liderazgos se hace notar en medio de una renovación dirigencial. Sin embargo, Cristina Fernández de Kirchner y Mauricio Macri -los máximos exponentes de la denominada grieta- resisten al paso del tiempo y no se bajan del ring.
En el proceso electoral de este 2023 tanto CFK como el expresidente mantuvieron roles diferenciados, pero coincidieron en no ser candidatos. A diferencia de la exvicepresidenta que optó por un bajo perfil llamativo, Macri asomó un poco más sus narices por lo que provocó un estallido interno en el PRO que provocó la demolición de Juntos por el Cambio (JxC). No solo intervino en la interna en favor de Patricia Bullrich contra Horacio Rodríguez Larreta en la interna, sino que también jugó abiertamente con Milei tras la paupérrima elección que realizó la alianza cambiemita en las generales.
Cuando muchos comenzaban a especular sobre un posible corrimiento de ambos de las más altas esferas de la política, la presidencia de un outsider con limitaciones evidentes y el catastrófico panorama de crisis que envuelve al país los trae a la arena de la disputa. Por supuesto, es una decisión de ambos sostenerse para darle continuidad a la grieta, pero ahora en una nueva fase.
“No me voy a ningún lado, ya saben dónde encontrarme, voy a estar acá cerquita, a dos cuadras en el Patria”, dijo Cristina el 5 de diciembre en un acto en el Salón Malvinas Argentinas del Anexo del Senado de la Nación. Allí, al despedirse de los trabajadores de la Cámara baja, hizo referencia a que se apostará en el Instituto que está ubicado del otro lado de la Plaza de los dos Congreso, en Rodríguez Peña 80.
Pocos días después, desembarcó en La Plata para acompañar a Axel Kicillof en la asunción de su segundo mandato como gobernador de la provincia de Buenos Aires. Su presencia en la Legislatura fue el dato político de la semana para el peronismo mientras todavía se lamen las heridas por la derrota sufrida. La puja por la conducción del nuevo proceso lo tiene al mandatario provincial como uno de los llamados a liderar la etapa y el guiño recibido por CFK fue una clara señal en ese sentido. Por supuesto, las tensiones que mantiene con Máximo Kirchner y La Cámpora, no cesan en un marco en el que se esperan definiciones políticas al respecto.
Ya instalada en el Instituto Patria, la expresidenta rememoró el 15 de diciembre de 2005, fecha en que Néstor Kirchner anunció la cancelación de la deuda que hasta entonces Argentina mantenía con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Cada acción que realiza comienza a marcar el termómetro del justicialismo en momentos en que ahora los tiene como oposición al gobierno nacional.
Por su parte, las intervenciones de Macri fueron más continuas a lo largo del 2023 y las mismas han minado el terreno del PRO y de JxC. La ruptura en pedazos de la alianza cambimieta fue una profecía autocumplida y no generó sorpresas. Si bien existen intentos para maquillar la situación, como por ejemplo la creación de interbloques en los distintos parlamentos, muchos dirigentes acusan al expresidente como uno de los principales responsables.
Pasó por diferentes postas antes de copar el gobierno de Milei. Primero la derrota de Rodríguez Larreta en las PASO y luego el tercer lugar obtenido por Bullrich en las generales, lo reposicionaron como dueño del PRO. Las relaciones íntimas con el ahora Jefe de Estado lo mantienen en la cancha a pesar de los cortocircuitos que surgieron tras el balotaje con la flamante ministra de Seguridad.
El otro hecho político también fue esta semana y lo tuvo como protagonista a Macri. El miércoles 13, junto a su ladero Fernando De Andreis, convocó a una reunión a varios dirigentes, pero no fueron Rodríguez Larreta ni Bullrich. Entre los presentes, estuvieron: Cristian Ritondo, Diego Santilli, María Eugenia Vidal, Jorge Macri, Guillermo Dietrich, Soledad Martínez, entre otros. Horas después, los diputados del PRO salieron a plantear un respaldo a las medidas económicas del gobierno.
A estos movimientos, que suman más ruidos internos al espacio amarillo, también se suman las intenciones de Macri de adueñarse de Boca Juniors. La descarnada postura que adoptó para sacar a Juan Román Riquelme del club con el uso de maniobras y operaciones judiciales es otro elemento que pinta sus intenciones. Además, juega en tándem con Javier Milei por lo que tanto el PRO como La Libertad Avanza meten fichas en una pelea en la que el peronismo sigue muy cerca.
Los nuevos tiempos de la política tienen a dos viejos conocidos que no quieren dar ni un centímetro de distancia en la batalla que se abrió. Una nueva fase de la grieta ha comenzado, con Cristina y Macri que no solo no dieron un paso al costado para darle lugar a nuevos liderazgos, sino que buscan permanecer en la primera planta. Todo apunta a que CFK bendiga a Kicillof como uno de los líderes del peronismo, mientras que Macri ya eligió a Milei como su escudo. El tiempo dirá como continuará esta historia para los dos en un escenario totalmente regresivo y doloroso para amplias capas de la sociedad.
LA MIRADA DESDE LA PROVINCIA
“Cristina va a dejar hacer, pero va a seguir siendo la jefa”
En la provincia de Buenos Aires el peronismo busca replegarse para luego retomar la iniciativa, pero primero deberán resolver los dilemas internos que lo aquejan. Axel Kicillof es para muchos número puesto para conducir, pero todavía no encuentra unanimidad. La compleja relación con Máximo Kirchner, quien presidente del PJ bonaerense, y sus aliados es un punto no resuelto y genera debates intensos.
Ante la consulta sobre el rol de Cristina Fernández de Kirchner, cerca de Kicillof señalaron a La Tecla que “ella va a estar expectante, a replegarse un poquito. Va a dejar hacer, pero va a seguir siendo la jefa. A Axel lo va a cuidar, ni lo va a exponer ni lo va a quemar pidiéndole nada extraño”.
“Ella va a ser la conductora de Axel para siempre”, sentenciaron desde la Gobernación bonaerense y, al mismo tiempo, aseguran que no es tiempo para que el gobernador sea el estandarte del choque contra Javier Milei.
A su vez, indicaron que Cristina “no va a permitir que haya un operativo clamor para que Axel sea el que lo enfrente al presidente porque eso no lo puede hacer por el rol que tiene”. Del mismo modo, consideran que “tampoco ella va a va a salir a serlo, va a esperar”.
En esa sintonía, afirmaron que “Axel planta bandera pero no va a ir al choque, no vamos a ser nosotros los que vamos a salir a insultar al gobierno nacional, por lo menos no en el primer momento”.
“Después, si ellos tiran bombas responderemos, pero no vamos a ser los que encabecemos el choque. Hay compañeros que no tienen la responsabilidad de gobernar y que pueden hacer esa tarea”, finalizaron con un claro mensaje hacia el interior del peronismo en medio de la interna.
INCERTIDUMBRE
Río revuelto en el PRO ante las jugadas de Macri
La dirigencia del PRO en la provincia de Buenos Aires atraviesa momentos inciertos ante los movimientos que se dieron arriba y el impacto por abajo se hizo sentir. Luego de perder no solo ampliamente contra Axel Kicillof sino también varias intendencias de peso, muchas figuras emigraron hacia el gobierno porteño de Jorge Macri y otros desembarcan en Nación con Javier Milei.
En este marco, las acciones de Mauricio Macri son seguidas de cerca al igual que aquellos que resolvieron sumarse al gobierno de La Libertad Avanza. Algunos intendentes fueron consultados por La Tecla para tener la mirada sobre la intervención política del expresidente, pero algunos prefieren no responder.
No obstante, un jefe comunal del interior habló sobre la integración de parte del PRO al gobierno nacional. Entonces, dijo que “Patricia notó que tenía cosas para aportar y lo quiere aportar. No es que esté llevando una estructura partidaria a su ministerio, pero la verdad que es una persona que ya tuvo experiencia, a lo mejor esas cosas es buena, brindársela a un país que necesita gente con experiencia”.
Luego indicó que “algo similar puede haber pasado con Caputo, creo que se vivió también parte de la gestión de Mauricio y en esa gestión quizás esté pendiente hoy y le permite sentarse en la decisión con un poco más de soltura”.
“Valoro que estén formando parte de este gobierno y entiendo que la posición de Mauricio y la del esquema nuestro va a ser apoyar todo lo que se pueda acompañar”, expresó.
Días atrás, el exintendente de Lanús y ahora jefe de gabinete del gobierno porteño, Néstor Grindetti, habló sobre la conducción del PRO en territorio bonaerense. En ese sentido, lanzó: “Empujar, vamos a empujar todos, hoy por hoy está Cristian Ritondo que tiene un liderazgo indiscutido, está el equipo de Jorge Macri liderado por Soledad Martínez y estamos nosotros, ese trípode somos los que de alguna forma estamos conduciendo cada uno de su lugar. somos los tres los que estamos re armando y relanzando lo que es el PRO en la provincia de Buenos Aires”. |
