La cuenta regresiva para que se desarrollen las PASO en todo el país está llegando a su fin. Para llegar de la mejor manera, el gobernador bonaerense acompañó a un precandidato presidencial, se reunió con sindicatos y nucleó a los intendentes peronistas del Conurbano Bonaerense para ultimar detalles en torno a la campaña electoral.
Tras su acto de campaña con el referente de la UTEP, Juan Grabois, y su reunión con referentes sindicales bonaerenses, el mandatario se reunió con los jefes comunales peronistas de la Primera y Tercera Sección, pero también se sumaron algunos outsiders como Hernán Ralinqueo (Veinticinco de Mayo), Ricardo Moccero (Coronel Suárez) y Marcelo Santillán (Adolfo Gonzáles Cháves).
Los primeros que visitaron a Kicillof fueron los intendentes de la Primera. Sin definiciones concretas, el mandatario bonaerense habló durante más de media hora, con énfasis en las obras que están por estrenarse en los municipios hasta la fecha de las PASO. Tras las reuniones, los protagonistas mantuvieron el hermetismo y no dieron muchos detalles sobre lo dialogado en el cónclave.
Sin embargo, según pudo saber LaTecla.Info, en los días que restan para las elecciones, se hará mucho hincapié en la utilización de las redes sociales como recurso para comunicar las obras a estrenar, debido a la veda de actos gubernamentales con fines proselitistas.
Las reuniones no solo fueron con los alcades de la Primera, sino que pocos minutos más tarde el Gobernador recibió a intendentes de la Tecera Sección Electoral y de los municipios del interior, con quienes se coordinó algunos lineamientos de la campaña.
"Estamos bien, pero necesitamos estar mejor", le dijo a este medio un dirigente de la Tercera Sección tras el encuentro. "Tenemos que estar en los distritos, ir casa por casa, militar. Destacar las obras y las políticas que llevamos adelante", añadió.
Los intendentes pusieron a consideración todas las obras que se están llevando adelante en sus pagos, y el equipo de campañadeterminará cuándo y dónde hará pie Kicillof de cara a las urnas.
El gobernador bonaerense Axel Kicillof se mostró hoy con el referente máximo de UTEP y precandidato a la Presidencia por Unión por la Patria, Juan Grabois, en lo que se interpretó como un intento por mantener un voto más de izquierda dentro de la alianza oficialista.
El encuentro tuvo lugar en Berisso, distrito gobernado por el peronista Fabián Cagliardi, donde ambos intercambiaron elogios.
Sin embargo, el dirigente de movimientos sociales no dejó de marcar diferencias con el ministro de Economía, Sergio Massa, postulante a suceder a Alberto Fernández con apoyo del Gobernador y el kirchnerismo en general.
Kicillof y Grabois visitaron y recorrieron una fábrica textil recuperada en Berisso, donde el segundo comprometió sus esfuerzos para “aportar al resultado acá en la provincia de Buenos Aires y de Axel, para que le vaya muy bien”. Al mandatario lo definió como “una esperanza del recambio generacional del movimiento".
"Unión por la Patria, con cualquier candidato, va a ganar las elecciones”, aseguró Grabois, añadiendo que su sector está elaborando “un proyecto que creemos que expresa la mayoría popular”, y en caso de perder las PASO “poner determinadas condiciones en el programa político social de la etapa que viene”.
Tras la visita a Berisso, el Gobernador se reunió con gremios de la rama industrial de la provincia de Buenos Aires.
En sus redes, Kicillof aseguró: “Tenemos el enorme desafío de recuperar el salario, reconstruir la trama productiva de la Provincia y ampliar derechos laborales”.
“Junto a representantes de gremios industriales analizamos la situación del sector y reafirmamos nuestro compromiso con el bienestar del pueblo trabajador”.
Esta tarde, tras el cónclave con los gremialistas, el mandatario provincial mantiene un encuentro con intendentes de Unión por la Patria de la Provincia.
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