El #24M reavivó la grieta entre albertismo y kirchnerismo: bonaerenses, al frente
Luego de las movilizaciones en el marco del 47° aniversario del último golpe cívico-militar, las internas volvieron a aflorar en el oficialismo. Referentes de La Cámpora y funcionarios albertistas, dispararon fuerte de cara a los próximos comicios.
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Con una nutrida movilización que partió desde la Ex-Esma hacia Plaza de Mayo, el kirchnerismo duro se movilizó ayer bajo la consigna "Democracia sin mafias". Desde La Cámpora, aprovecharon la oportunidad para deslizar su malestar por el fallo de la Corte Suprema contra la vicepresidenta y la renegociación con el Fondo Monetario Internacional.
"Lo que uno entiende y ve, es que el partido judicial y el macrismo tuvieron la decisión de desgastar y perseguir la figura de CFK. La citaron para ocho indagatorias el mismo día, nunca le pasó eso a ningún ciudadano", sostuvo el diputado nacional y presidente del PJ bonaerense, Máximo Kirchner.
Asimismo, reiteró sus cuestionamientos al acuerdo negociado por el Gobierno que integra con el FMI y pidió "clavar los tacos en el piso y decir que no", ante los vencimientos de deuda que el país deberá afrontar. "A veces hay que saber clavar los tacos en el piso y decir que no, por una cuestión real y programática de los números, el acuerdo era malo", dijo.
"El desafío más grande es tratar de que la postura, aquello que fuimos marcándole a nuestro gobierno, se entienda, y no con el diario del lunes sino con el del día, cuando advertimos que estaban los problemas, lo dijimos incluso con el FMI, hoy se escucha decir que hay que renegociar, una votación que se dio con la guerra comenzada, con los precios de los commodities disparados", añadió.
"Quizás algunos pensaban que era algo ideológico, pero la Argentina tiene una curva de vencimientos que agobia y estresa sus cuentas. Lo peor de todo es que hay una sociedad que reclama más patrulleros, más cámaras, PyMes que reclaman recuperar el poder adquisitivo de esos trabajadores, y cuando pudimos haber torcido en favor de la gente no se hizo, y es lo que hay que hacer y si alguien se enoja, se enoja y la sociedad define", completó.
La respuesta del albertismo En contraposición, este sábado salió al cruce el ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, que afirmó que el enfrentamiento entre el presidente Alberto Fernández y la vicepresidenta, Cristina Fernández Kirchner, sería "para alquilar balcones" y estimó que el mandatario "le gana una PASO" a la titular del Senado.
"Estoy convencido de que la única forma de salir de este tipo de situación, donde hay segmentos que no se ponen de acuerdo, en vez de enojarse, es competir", sostuvo el funcionario nacional.
En declaraciones radiales, el integrante del Gabinete ratificó que Cristina Kirchner "no está proscripta" y remarcó que "tiene todo el derecho del mundo a presentarse como candidata".
Y continuó: "Si Cristina le gana a Alberto, quién duda que será la próxima Presidenta; y si Alberto le gana a Cristina, quién duda de que será el próximo Presidente". Al ser consultado sobre cuál sería el resultado de esa eventual interna en el oficialismo, el titular de la cartera policial no dudó: "Estoy convencido de que Alberto gana". "Me gustaría ver juntos a Alberto y a Cristina, pero hay muchos que meten la cuchara, el palo en la rueda para que eso no suceda.
Venimos escuchando diatribas persistentes del (referente de La Cámpora Andrés) “Cuervo” Larroque hace tiempo", se quejó. Y profundizó: "Ninguno de los conductores de la ‘orga’ saltó a decirle que deje de decir esas cosas, entonces tengo que inferir que lo mandaron a decirlas".
El referente peronista definió a la cúpula camporista como "esta gente que se la pasa volcando elementos que lesionan al Presidente, pensando que eso va conseguir que hocique el Presidente y ellos puedan volver a poner con el dedo al que se le antoja". "Alberto Fernández sostiene que tiene que haber PASO porque pretende que haya un Presidente elegido por una primaria, sin dedos mágicos que estén eligiendo", concluyó.