Luego de las PASO y las generales de 2021, el radicalismo sacó pecho por su alentador crecimiento, y se perjuró ir en busca de cada espacio que se dispute con el PRO para los próximos comicios.
Así, con el 40% obtenido por Facundo Manes en territorio bonaerense, los boina blanca se plantearon un objetivo de máxima: candidato a presidente radical, candidato a Gobernador radical y postulantes a las intendencias del mismo partido.
Sin embargo, con ambos espacios dispuestos a ir con sus propios candidatos para estos cargos (aún no está definido si habrá internas en algunos sí y en otros no), un aspecto no menos importante queda aún por definir: la conformación de las listas seccionales.
En La Plata, cuando la mesa provincial amarilla mantuvo una de sus reuniones semanales, referentes partidarios aseguraron que todas las alternativas estaban abiertas: uno o dos candidatos a gobernador, uno o más candidatos a intendentes y, obviamente, si habría varios precandidatos a presidente.
Entre dientes, aunque algunos lo expresan públicamente, mencionan la posibilidad de que se negocien listas mixtas -radicales y amarillos, con representación también de socios menores- para las candidaturas a diputado o senador provincia.
También en el radicalismo evalúan la conveniencia de tal hipótesis, más allá de ciertos sectores que se mantienen firmes y piden “listas bien radicales” para competir con sus aliados.
Uno de los que levanta la bandera de la alquimia es el senador nacional Alfredo Cornejo, quien participó ayer de un reconocimiento que recibió el precandidato bonaerense de la UCR, Maximiliano Abad, por ser el legislador más laborioso.
En diálogo con La Tecla.info, el referente boina blanca sostuvo: “Siempre lo he sostenido, que para que este sea un gobierno de coalición la sociedad debe comprender que es un gobierno de esas características y creo que en el 2021 eso se comprendió cuando se mezclaron radicales con PRO y PRO con radicales y creo que permitiría, en la hipotética situación que ganara JxC, propendería a un gobierno de coalición muy superior al 2015-2019, que no fue un gobierno de coalición propiamente dicho”.
Según pudo saber este medio, los principales dirigentes de la alianza opositora negocian para determinar un encuentro cumbre entre los presidentes y vice de cada partido que integra Juntos, con el fin de acordar las reglas de juego.
La cita podría concretarse en los primeros días de abril, en una localización a determinar. “Aún no está definido, pero no queremos que pase de esa fecha”, aseguraron desde el cuartel PRO.
En principio, en la cabeza de los amarillos ronda la idea de que, junto con sus aliados de la UCR, se queden con el 70% de los lugares en las listas seccionales, reservando el restante 30% a hombres y mujeres de la Coalición Cívica y el Peronismo Republicano.
Claro está, que la pulseada será por la forma en que radicales y macristas se repartirán ese 70%. Desde el PRO creen que deberían tener la mayor parte de los lugares ya que fueron los ganadores en la PASO de dos años atrás, e imaginan que sus socios reclamarán lo mismo por tener mayor cantidad de territorios ganados. “Pero nosotros gobernamos los distritos más grandes”, replican los amarillos.
Un aspecto no menor a resolver es el cabeza de lista en caso de acordar candidaturas cruzadas. En ese caso, una de las posibilidades es que, una vez más, se utilice el resultado de 2021. “Donde ganó Santilli, que encabece uno del PRO, y lo mismo en aquellas secciones electorales en las que se impuso Manes”.
Dos años atrás, los boina blanca se impusieron en las secciones Cuarta, Quinta, Sexta y Séptima, mientras que los amarillos ganaron en las secciones Primera, Segunda, Tercera y Octava.
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