Cada testimonio conmueve al país entero que se encuentra en vilo, a la espera de justicia por el asesinato de Fernando Báez Sosa, el joven que fue víctima de ocho rugbiers que lo mataron a golpes a la salida de Le Brique en Villa Gesell, los primeros días de transcurrido el año 2020.
El foco de la polémica estuvo puesto en los acusados, que se presentaron al juicio con el rostro cubierto por mascarillas quirúrgicas. Burlando, solicitó que los acusados se la quiten y manifestó que no llevaban barbijo puesto cuando mataron a Fernando. Cabe aclarar que, si bien el Servicio Penitenciario sugiere que se utilice, es optativo llevarlo puesto o no.
Al terminar la segunda jornada del juicio, el abogado de la familia Báez Sosa, Fernando Burlando, escribió en su cuenta de Instagram “la acción sincronizada de los asesinos permitió la construcción de un muro infranqueable, nadie pudo acercarse a Fernando, nadie pudo ayudar a Fernando, así los asesinos exterminaron a quien calificaron”.
En el Tribunal de Dolores, hoy se presentarán a declarar los patovicas que sacaron al joven asesinado y a los responsables de su muerte, tras una pelea dentro del boliche. También prestará testimonio el efectivo que le practicó la maniobra de RCP y Pablo Ventura, el joven que fue incriminado en el hecho por los rugbiers, cuando fueron cuestionados por la autoridad policial, horas después del asesinato.
Pablo ventura fue detenido para ser liberado a los cuatro días por falta de pruebas y resultar sobreseído definitivamente de la causa. Al momento del incidente, se comprobó que el falso acusado, se encontraba en Zárate, a 500km del lugar de los hechos. “Confío en que después de esto, todo se termine de una vez” declaró a los medios.
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