Tres años pasaron para que los intendentes de Juntos volvieran a verse las caras, luego de la salida de Cambiemos de los gobiernos nacional y provincial en las elecciones de 2019.
La idea comenzó a amasarse en La Plata y se consolidó en Magdalena, cuando los jefes comunales del radicalismo se reunieron en foros sectoriales y lanzasen la propuesta de reeditar la mesa grande opositora.
La idea fue bien recibida por sus pares amarillos, que no pusieron objeciones para que el remozado espacio se desarrolle en Balcarce, pagos del radical Esteban Reino.
Sin embargo, la previa al Foro de Juntos se calentó. La mecha la encendió el boina blanca Gonzalo Peluso, quien recibió al gobernador Axel Kicillof en su distrito para inaugurar una escuela, deshaciéndose en elogios para el mandatario bonaerense y apuntando a María Eugenia Vidal y Patricia Bullrich, encumbradas dirigentes de sus socios políticos.
Varios alcaldes del PRO tomaron debida nota de lo dicho por el alcalde de la UCR, y llegaron dispuestos a reclamar a sus socios más cuidado con las declaraciones públicas, como las que realizó el magdalenense.
Con la bronca amarilla in crescendo y rápidos de reflejos, los negociadores de los espacios que conforman Juntos armaron una reunión de la Mesa provincial, a la que se sentaron los intendentes Néstor Grindetti y Diego Valenzuela; su par de San Miguel, Jaime Méndez y su referencia política y senador provincial, Joaquín de la Torre; el senador y titular de la Coalición Cívica, Andrés De Leo y cuatro representantes del radicalismo.
Por la UCR posaron para la foto el alcalde anfitrión; su colega de Trenque Launque y titular del Foro de jefes comunales radicales, Miguel Fernández; el titular del bloque de diputados de Juntos y presidente del Comité Provincia, Maximiliano Abad y el mencionado Peluso.
“Lo metimos en la foto para calmar un poco las aguas, porque había algunos intendentes y dirigentes del PRO un poco enojados. La foto de la mesa, con él incluido, bajó un poco la calentura”, confesó uno de los que se sentaron a la mesa en la previa al Foro.
El pacto entre sectores incluyó no solo obviar diferencias internas, sino también dejar para otra oportunidad (probablemente para noviembre) la discusión política y partidaria, para centrarse en las demandas comunes por las deudas de la Provincia y las dificultades para avanzar con las obras por la desactualización de los fondos girados a los municipios.
“Dejamos lo partidario para otro momento, pero pronto tendremos que sentarnos a charlar sobre varias cosas. Una de las que nos preocupa es la posible eliminación de las PASO, porque ahí vamos a tener problemas en serio con el tema de candidaturas”, dijo a La Tecla.info un mandamás radical.
De hecho, la posible jugada del oficialismo para complicar la vida interna de la oposición podría modificar lo que hasta ahora era una decisión firme de la UCR para ir por todos los cargos posibles. “Si no hay PASO, por ahí tenemos que repensar la estrategia y analizar candidaturas o fórmulas mixtas”, sostuvieron los boina blanca, una posibilidad que demandará mucha negociación y formas de definir, por caso, quién es el candidato a gobernador y quién a vice.
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