"Primero la reunión con los intendentes a los que les va a presentar el Gabinete, después la foto con los intendentes, igual que sucedió en Tigre tras los comicios, y quizá una más de todo el equipo solo", contaba-enumeraba a La Tecla una de las flamantes incorporaciones al equipo de prensa que comanda la ministra de Comunicación Pública, Jésica Rey.
"También van a salir a hablar varios de los intendentes, Axel y un par de sus ministros", agregó otro funcionario de prensa, en este caso del municipio anfitrión, Esteban Echeverría. Y efectivamente, esto último fue lo que se cumplió. Lo único que se cumplió. Sí hubo declaraciones, no hubo fotos.
Ahí quedó la tribuna-tarima montada al aire libre en el coqueto Espacio Marfil (calle Ramón Santamarina), sin ser utilizada. A decir verdad, sirvió de asiento para asesores de algún municipio, fotógrafos, periodistas y camarógrafos castigados por la furiosa tarde (N de la R: un 10 para la barra instalada afuera, con jugos, agua y limonada bien fría).
Se veía venir. Concluido el encuentro, mientras Kicillof, Carlos Bianco (Jefe de Gabinete), Federico Thea (Secretario General), Sergio Berni (ministro de Seguridad), Julio Alak (Justicia) y Teresa García (Gobierno) se preparaban para hablar con los medios, uno a uno los jefes comunales salían del lugar rumbo al estacionamiento a encontrarse con sus vehículos y emprender la vuelta casa. Claramente, no iba a haber foto.
Berni, llega apurado a la reunión: había estado presente en la jura como senadora provincial de su esposa, Agustina Propato
El por qué tiene que ver con el tiempo. La tarde, complicada en cuanto a la rosca, sobre todo en lo que respecta a la definición de las autoridades de la Legislatura bonaerense, hizo que un buen número de los protagonistas, entre ellos Martín Insaurralde, Verónica Magario y la mencionada García, estuvieran en La Plata más de lo que tenían que estar. Y el cónclave se fue demorando.
Pero también hubo inconvenientes de tiempo relacionados al después, ya que varios de los asistentes, por diversos motivos, tuvieron que salir apurados, casi a las corridas. Por ejemplo, la ministra de Desarrollo para la Comunidad, Fernanda Raverta, debía asistir sí o sí al acto de egreso de su hija. Y el intendente de Merlo, Gustavo Menéndez, debía asumir su segundo mandato.
"Era con todos o con ninguno", resumió un Kicillof boy, y destacó que para la foto del equipo todo junto habrá que esperar al acto del jueves en el Teatro Coliseo Podestá, cuando el ya gobernador en funciones les tome juramento a todos y cada uno de sus ministros, los encargados de llevar adelante, al menos en esta primera etapa, los destinos de todos y cada uno de los bonaerenses.
Ariel Sujarchuk, intendente de Escobar, otro de los que partió de manera rauda |