Fuera de Foco
25 de noviembre de 2019
DE CARA AL VERANO
Quemá calorías y tonificá con el sexercise
En esta nota La Tecla te trae un secreto infalible para mantenerte en forma y llegar impecable al verano: ejercitate teniendo sexo y hacé que el entrenamiento sea algo más que placentero
Para las personas ir al gimnasio suele ser un verdadero infierno. Por este motivo, en general no sostienen la actividad física durante el año. Muy por el contrario, suelen comenzar a ejercitarse en septiembre y lo abandonan cuando el calor se va y comienzan los días grises y las lluvias.
Claro está que no lo hacen por puro placer; sino con un objetivo claro y puntual: llegar lo mejor posible a lucir la bikini o el short de baño de la nueva temporada en el destino que hayan elegido para vacacionar.
Pero qué pensarías si te dijeran que podés quemar grasas, perder peso y tonificar tu figura, disfrutando del proceso y sin mayores esfuerzos.
En esta línea, de acuerdo a un estudio llevado a cabo por la Universidad de Quebec, Canadá, el Energy Expenditure During Sexual Activity In Young Healthy Couples, determinó que los hombres queman en promedio 4,2 calorías por minuto durante una relación sexual, frente a las 9,2 que queman al correr en la cinta. Por su parte, las mujeres pierden 3,1 calorías durante el sexo, mientras que se deshacen de 7,1 al hacer running.
Con estos números estamos en condiciones de afirmar que tener un encuentro pasional equivale a realizar media hora de entrenamiento.
En segundo lugar es importante destacar que, como se explica en el estudio, la práctica sexual brinda un extra que no se consigue yendo al gimnasio: “la fricción de los cuerpos genera un ajuste térmico resultante del mecanismo de termorregulación del cuerpo, por lo que acelera el metabolismo”.
Y por último, es conocida y popular la frase que asegura que el sexo es salud. Esto se debe a que al tener relaciones sexuales liberamos sustancias químicas, relajantes y de bienestar que nos ayuda a mantener una mejor salud mental y estado de ánimo. Por este motivo, tener un vida íntima activa, sana y placentera impactará positivamente favoreciendo al estado de ánimo y bienestar de todos los seres humanos.
Ahora bien, sabiendo esto cada uno es libre de elegir cómo quiere estar forma: calzándose las zapatillas o quitándose las prendas. Porque no cabe duda alguna, el sexercise es el
ejercicio más completo y placentero para lucir impecable todo el año.
Las prácticas en números
Richard Smith, autor de The Dieter's Guide to Weight Loss During Sex, detalló el gasto calórico según la práctica. Así fue como determinó que desvestir a la pareja quema 12
calorías; tener un orgasmo, 27; hacer cosquillas, 30; besar apasionadamente o realizar un striptease, 60.
Por su parte, la sexóloga estadounidense Jaiya Kinzbach, en su escrito Red Hot Touch: A head-to-toe handbook for mind-blowing orgasms, agregó que en una hora de besos se queman 90 calorías; haciendo masajes, 80; y practicando sexo oral, 100.
Sin embargo, los expertos señalan que para conseguir una quema extra de calorías, lo más recomendable es tener sexo en ayunas porque de esta manera el cuerpo recurrirá a las reservas de grasa acumuladas.
Beneficios recíprocos
El deporte y el sexo no se sustituyen pero sí se complementan. Diversas modalidades de entrenamientos tienen repercusiones positivas el rendimiento sexual; y ciertas posiciones sexuales brindan resultados similares en prácticas en gimnasios.
Entrenamiento e intimidad
De acuerdo a estudios científicos, la ejercitación impacta positivamente en la salud cardiovascular y controla los niveles de insulina, favoreciendo la fase de excitación sexual. Pero además, mejora el autoestima y favorece al deseo.
La 'Carretilla', fuerza de hombros
La mujer se apoya sobre sus antebrazos y rodillas; mientras el hombre, de cuclillas, toma a su pareja por la pelvis y se pone a horcajadas teniendo el control total del movimiento. Pese a que son ellos quienes manejan la situación y tienen un control total, esta postura resulta agotadora para ellas.
Beneficios: la mujer tonifica hombros, brazos y abdomen; el hombre fortalece sus brazos.
El granjero, solo para avanzados
El hombre debe permanecer de pie, con la espalda sobre la pared. De esta manera, elevará a la mujer que apoyará sus rodillas en el mismo lugar, enlazándolas a los lados del cuerpo de él. Ella deberá inclinarse hacia atrás hasta colocar las manos en el suelo.
Beneficios: con esta posición se ejercitan los músculos dorsales anchos y lumbares, lo que equivale a trabajar con peso muerto.
El Perrito: simple y eficiente
En esta posición, el hombre debe sentarse sobre de rodillas apoyando los talones en los glúteos. Por su parte, la mujer se posa encima con los pies hacia atrás y se balancea ajustando los movimientos a un ritmo y forma.
Beneficios: pese a no ser demasiado exigente, esta postura sexual define glúteos, abdominales y trabaja el flexor de la cadera... Y es muy placentera.
Juntos, en un camino al éxtasis
La mujer se agarra de la cama, el hombre se para entre sus muslos y ella levanta la cintura, mientras lo sujeta de la cadera con las rodillas. La posición no es nada fácil, pero sus resultados físicos y placenteros son más que satisfactorios para ambos.
Beneficios: al tener que mantener la cadera levantada y realizar movimientos hacia delante, su efecto es similar a realizar abdominales.