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9 de agosto de 2019
TRAS SER DENUNCIADO
Gustavo Lutteral fue condenado a dos años de prisión
El conductor radial amenazó a María Florencia Di Yorio, con quien tuvo una relación esporádica, con mostrar fotos de su intimidad si lo dejaba. Y, en una oportunidad, llegó a llamarla 118 veces en el transcurso de un día
El conductor Gustavo Lutteral fue condenado a dos años y dos meses de prisión en suspenso por los delitos de amenaza y desobediencia. Esto se da en el marco de una causa iniciada en el año 2016 por María Florencia Di Yorio, con quien Lutteral había mantenido una relación esporádica.
El fallo fechado el 5 de agosto indica que "el Tribunal resuelve condenar a Gustavo Carlos Lutteral García de las condiciones personales obrantes en autos, por ser el autor penalmente responsable del delito de amenaza coactiva en concurso legal con desobediencia a funcionario público a la pena de dos años y dos meses de prisión en suspenso y costas".
En diálogo con Teleshow, Gustavo D'Elía, abogado de Di Yorio, explicó que "la denuncia fue por cinco hechos de amenazas y por el delito de desobediencia"; mientras que Marcelo Biondi, defensor de Lutteral, resaltó que fue condenado solo por dos de los seis delitos de los cuales se lo acusaba.
Respecto al vínculo que unía a Lutteral con Di Yorio, el letrado representante de la mujer contó que "en 2016 él estaba casado con la mamá de los hijos, en estado de separación, y empieza a salir con Florencia" con quien "desde 2012 tenían relación de amantes, durante algunos lapsos".
Según el abogado, Lutteral comenzó a "tener actitudes raras" y en esta línea explicó que el conductor "es bastante posesivo con las mujeres". Al notar esto, de acuerdo a lo expresado por el abogado, Florencia intenta terminar la relación, él se pone mal y comienza a amenazarla: "Le dice cosas como: 'Si no seguís, conmigo voy a hacer conocer nuestras fotos de la intimidad'".
Además, D'Elía aseguró que la relación entre ambos empeoró progresivamente hasta que el 21 de febrero de 2016 Lutteral llegó a llamarla por teléfono 118 veces, entre las 2 de la mañana y las 6 de la tarde: "Hablaron ocho veces; 110 llamó y cortó. Esto está constatado por las pericias telefónicas", sentenció.
A partir de las reiteradas llamadas, Di Yorio recurrió a la Oficina de Violencia Doméstica y solicitó una medida perimetral con una prohibición de contacto que, según el abogado, le fue otorgada al día siguiente por la jueza civil.
Pero indicó que, pese a la medidad "Lutteral no paró (...) Siguió llamando en reiteradas oportunidades, volvía con el tema de los videos y las fotos. Entonces hace la denuncia nuevamente, por el delito de desobediencia".
El juicio se desarrolló entre junio y julio en el Tribunal Oral en lo Criminal número 10: "El 5 de agosto la jueza Mora, luego de un juicio escabroso, arribó a que fuera absuelto de cuatro hechos y que fuera condenado por el delito de desobediencia a dos años y 2 meses de prisión en suspenso".