El Gobernador se hizo fuerte en La Plata con la consolidación de su poder territorial y de su espacio político. El traje de conductor y el llamado a conformar un frente para los que quieran entrar. La reacción del kirchnerismo.

El golpe sobre la mesa de Kicillof que impulsa la era poscristinista en el peronismo

“Caminante, son tus huellas 
el camino y nada más; 
Caminante, no hay camino, 
se hace camino al andar. 
Al andar se hace el camino, 
y al volver la vista atrás 
se ve la senda que nunca
 se ha de volver a pisar. 
Caminante no hay camino 
sino estelas en la mar”.

El fragmento del poema escrito por el español Antonio Machado encaja para tratar de comprender las perspectivas trazadas por Axel Kicillof en el acto que encabezó en La Plata el sábado por la tarde. “Hay otro camino”, fue el lema elegido para el plenario del Movimiento Derecho al Futuro (MDF), el germen -quizás- de lo que podría ser la nueva etapa en el peronismo. El liderazgo de Cristina Kirchner es desafiado hace tiempo y la resistencia a un cambio de mando se hace sentir por medio de La Cámpora en la primera línea de fuego.

“Axel armó su cumpleaños con una invitación a todos los que quieran ir, pero tendrán que comer, tomar y bailar lo que él les diga”, dijo un envalentonado dirigente con terminal en el sur del Conurbano bonaerense tras el multitudinario plenario hecho en el camping de UPCN. Cerca del Gobernador dicen que reunieron unas 40 mil almas y los menos optimistas arriesgan un total de 25 mil, una cuenta difícil de constatar en función de la disposición geográfica del espacio.

Con más aparato que autoconvocatoria, pero con un fuerte impacto de la puesta en escena marcó un paso más en el trayecto emprendido por Kicilof hacia la independencia definitiva de su madre política. La centralidad absoluta que mostró se evidenció en dos grandes aspectos: el primero es que fue el único orador de la jornada en la que se decidió que el intendente local, Julio Alak, no hablara y se rompiera una tradición en actos de ese estilo, y el segundo en cómo se configuró la foto con un acompañamiento consolidado de dirigentes políticos, sindicales, sociales y de derechos humanos.

“Acá estamos, dejensé de joder”, fue la primera impresión de un intendente del interior -compartida por varios más- que dirigió el mensaje al resto de los sectores del peronismo. “Fue una demostración de fuerza muy importante, un mensaje muy claro”, evaluó otra voz kicillofista.

El arranque del discurso de Kicillof fue para dejar en claro que el MDF se pretende a largo plazo: “Estamos en una línea de largada, en un momento fundacional: hoy nos ponemos en movimiento y cada vez somos más”. Por supuesto, las críticas a Javier Milei no faltaron, pero lo jugoso giró en torno a la disputa interna en el peronismo.

Hubo un breve momento en que mencionó a la presidenta del PJ nacional y expresó que “sin una prueba quieren condenar a Cristina. El peronismo sufrió persecución muchas veces, sabemos que es para disciplinar a los que luchan y representan. Basta de persecución y partido judicial”. En el medio de la jornada desde el axelismo hicieron saber que están al tanto de que se esperan novedades de la Justicia sobre el futuro de CFK. Algunos arriesgaron que sería el martes, pero otros fueron más cautos y dejaron abierta la posibilidad para otro momento.

Mientras las distintas tribus de Unión por la Patria ven un futuro complicado en las urnas, el Gobernador recordó que “hace 20 años que el peronismo no gana las elecciones intermedias” y reafirmó: “Tenemos una misión, que es ganar en septiembre y ganar en octubre”. Tampoco fue casual que se encargara de reiterar que los comicios serán desdoblados, sobre todo luego de una ola de versiones en las que se indicaba que el kirchnerismo insistiría con la unificación de la votación. Para que no queden dudan sobre su planteo estratégico, lanzó: “La discusión no es un lugar en las listas, es un lugar en la historia”.

El histórico exintendente y jefe político del distrito de Ituzaingó, Alberto Descalzo, manifestó que “para nosotros es fundamental hacer un gran frente y llamar a todos los sectores del campo nacional, del campo popular, de aquellos hombres y mujeres que quieran pelear por la patria, por los principios de esta patria”. En cuanto a la chance de un peronismo unido, respondió que “estamos haciendo todos los esfuerzos para que así sea, ya escuchamos al gobernador y llamó a un gran frente nacional, creo que ese es el camino”.

El ministro de Trabajo, Walter Correa, es de los más decididos a la hora de la discusión interna y no deja dudas sobre su posicionamiento. “Estamos convocando a un movimiento donde realmente se enfrente a este gobierno de extrema derecha que es de Javier Milei y donde tenga una centralidad quien ganó dos veces la provincia de Buenos Aires, que es nuestro gobernador Axel Kicillof”. Asimismo, sentenció: “Es el que tiene que conducir sin ninguna duda”.

La reacción del kirchnerismo no se hizo esperar y desde temprano avisaban que su atención estaba en otro lado. Máximo Kirchner fue a Moreno a participar del Congreso sobre Ecología y Justicia Social “Cuidar la casa común”. Estuvo acompañado por la intendenta, Mariel Fernández, y la ministra de Ambiente bonaerense, Daniela Vilar. La presencia de la integrante del gabinete de Kicillof fue motivo de comentarios maliciosos en La Plata durante el sábado.

En el cristinismo, según pudo conocer La Tecla, la lectura fue crítica sobre lo acontecido en la capital bonaerense. “No tiene nada de novedoso, las nuevas canciones las escriben los viejos actores”, resaltaron. En tanto, consideraron que “Cristina que propone un discurso con una plataforma de gobierno en los últimos actos que dio”, sostuvieron y analizaron: “En Axel eso no se ve, el gobierno no es una plataforma de gobierno, el gobierno de la provincia no tiene nada disruptivo”.

“No hay nada novedoso en ese acto, juntan gente, todo aparato. Nosotros hasta ahora no nos propusimos juntar gente, sino sectorizar para poder relevar las demandas de y pensar qué construir a partir de esas demandas”, expresaron. Luego consideraron que
“tienen un permanente intento de invisibilizar a Cristina. La niegan. Cristina no existe, no existió ni va a existir en este proyecto político y a todos esos que están ahí, todos, los inventó Cristina”.

No son pocos los sectores del MDF que se sienten casi ganadores de la pelea interna que encarnan contra Cristina y La Cámpora. Algunos lo describen como una pelea de boxeo en la que “Axel ganó cada round que se peleó”, pero avisan: “Falta el más importante”. El asalto definitivo -según afirman- es el armado de las listas donde Máximo Kirchner sea relegado de la provincia de Buenos Aires y CFK desista de ser candidata en la Tercera Sección electoral para postularse como diputada nacional.

En el mismo envión avisan: “Hay que mirar ahora qué hacen los intendentes del massismo, varios están pensando en Axel”. Desde el Frente Renovador intentan no perder más terreno y en las últimas horas el diputado provincial, Rubén Eslaiman, plantó bandera: “Importantísimo para nuestra Provincia sería volver a tener a Sergio Massa como diputado Nacional”.

El nuevo paso de Kicillof fue un golpe sobre la mesa que impulsa lo que muchos en el peronismo anhelan hace tiempo: la era poscristinista. La batalla no está concluida y la última palabra no se ha dicho. Tras finalizar el acto le dijo a La Tecla que “es con todos adentro”, pero después aclaró: “Hay que querer entrar”. ¿Cristina aceptará sin chistar las condiciones que puso el Gobernador? ¿El hijo político de la expresidenta dará un paso atrás o se mantendrá firme en su llamado? La historia continuará mientras Milei goza de un escenario cada vez más favorable en la provincia de Buenos Aires.

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