Según informó Clarín, el peronista Mariano Cascallares pidió 27 millones para hacer obras viales y comprar once camiones. Y Gabriel Katopodis, de San Martín, está tramitando 150 millones de pesos para construir un paso a nivel, un monto que reforzará con fondos propios.
Además, Fernando Gray, otro peronista que dirige el partido de Esteban Echeverría, inició los trámites para pedir 18 millones para hacer obras menores y comprar maquinaria. Lo propio sucede con Pilar, Bahía Blanca, Tres de Febrero y Quilmes, entre otros.
Claro, la administración bonaerense le poné límites al asunto y no todos los municipios pueden acceder a estos fondos. De los 135 partidos, sólo 30 exhiben las cuentas ordenadas que exige el banco.
"A nosotros nos regula el Banco Central y no podemos poner en riesgo los fondos de la Provincia, con lo cual sólo podemos prestar a quien tenga fondos o un flujo como para poder responder y pagar las cuotas", explicó Curuchet.
Hace un par de semanas, incluso, desde la administración central se soltó el duro dato que señala que 109 municipios tenían complicaciones para pagar sueldos y aguinaldos y que unos treinta se habían acercado hasta el ministerio de Economía y la Secretaría de Asuntos Muiniciplaes a solicitar ayuda. Como se dijo, no para obras.
Antes, en cuanto a la relación Bapro-municipios, La Tecla había dado a conocer que hay once municipios a los que el Bapro no podía asistir crediticiamente por no precalificar, según se informaba desde el Ministerio de Economía bonaerense. Se trataba de créditos en general, no especificamente para obras.
¿Cuáles eran los municipios vedados? Azul, liderado por el ahora macrista Hernán Bertellys; Balcarce, por el radical Esteban Reino; Baradero, por la ex GEN Fernanda Antonijevic; Chacabuco, por el boina blanca Víctor Aiola; Chascomús, por el vecinalista-FR Javier Gastón; y Coronel Pringles, por el vecinalista Carlos Berterret.
También General Pueyrredón, comandado por el vecinalista-Pro Carlos Arroyo; Lezama, por el radical Arnaldo Harispe; Rauch, por el radical Maximiliano Suescun; y Navarro y San Antonio de Areco, conducidos por los peronistas Santiago Maggiotti y Francisco Durañona, respectivamente.
“Esta calificación la hace el Ministerio de Economía de la Provincia en función de los ingresos y egresos (pago de sueldos, etcétera) de cada municipio. También se toman en cuenta los compromisos asumidos por cada intendencia. No es algo que decida el banco”, expresaban desde Economía.
“Desde la Municipalidad no podemos acceder a financiamiento, porque el Banco Provincia no nos da crédito por no ser un municipio sostenible económicamente; lo que también es una dificultad para nosotros”, expresaba el chascomunense Gastón, en el marco de la incomodidad generada a partir de la ya famosa rifa del campo.
Por su parte, el chacabuquense Aiola expresaba: “Me dijeron que la capacidad de endeudamiento eran 180.000 pesos porque la masa salarial es el 62,7% del presupuesto. Ahora estamos tratando de trabajar eficientemente para au-mentar esa capacidad. Intentamos reducir las horas extras, tomar la menor cantidad de gente posible. La idea es hacer más eficiente el Estado”.
El intendente radical completó: “Con lo poco que tenemos tratamos de ser más eficientes. Pero es difícil. Además influye la deuda municipal, que asciende a unos 60 millones de pesos. Eso hace que no precalifique. Sin embargo, en lo que más se fijan ellos, insisto, es en la masa salarial. Si tenés deuda con medio mundo, no te prestan”.
¿Se puede salir de la lista? Sí, claro que se puede. Hasta no hace mucho tiempo, los integrantes eran doce (o más), pero Necochea, dirigida por el massista Facundo López, logró mejorar sus números y, después de varios años, consiguió acceder a un crédito. |
