Una competencia por el manejo electoral

El 2019 tendrá pelea electoral y, además, contienda en lo electoral. El juego de palabras esconde una cuenta pendiente que los tres poderes del Estado nacional tienen con la provincia de Buenos Aires desde hace casi un lustro: designar a la conducción del Juzgado Federal N°1 de La Plata, el tribunal encargado de coordinar y ejecutar las elecciones bonaerenses, el distrito en donde este año se librará la madre de la batalla presidencial.

El juzgado se encuentra vacante desde septiembre de 2014, tras la muerte de su titular, Manuel Humberto Blanco; y hasta la fecha, en su lugar fueron nombrados varios subrogantes. Actualmente, el cargo lo ocupa interinamente el titular del Juzgado Civil, Comercial y Contencioso Administrativo N°2 de La Plata, Adolfo Gabino Ziulu.

El poderío del tribunal es grande: define desde la habilitación de candidaturas y alianzas hasta la aprobación de temas minúsculos para el común de los mortales pero claves para la política, como los apodos de los postulantes o el color de las boletas que estarán en el cuarto oscuro.

Pero la deuda promete ser saldada este año, incluso antes de las elecciones. La decisión política de nombrar al nuevo responsable del manejo de los comicios en el territorio bonaerense está tomada, por lo menos desde el Consejo de la Magistratura de la Nación. El órgano que se encarga de la selección de los jueces se encuentra en plena elección de la terna de magistrados que será elevada al Poder Ejecutivo para que este elija al nuevo titular del Juzgado Federal N°1.

En la carrera por el puesto vacante se anotaron 84 competidores, pero solo 34 sortearon los exámenes de oposición y antecedentes. Entre los postulantes que siguen en pie aparecen desde el juez Federal de Dolores, Alejo Ramos Padilla, hasta uno de los hijos del propio Manuel Blanco; además de otros, como el titular de la Secretaría Penal Tributaria del Juzgado Electoral, Diego Isasa, o el propio Laureano Durán, que subrogó el tribunal durante las elecciones de 2015.

El concurso para elegir al nuevo juez arrancó el 22 de agosto del año pasado, con la prueba de oposición; continuó el 13 de diciembre, con los informes de calificaciones; y se espera que en los próximos días se sortee la comisión de selección, que definirá las entrevistas personales. Con toda esa información, el Consejo elegirá una terna, que luego elevará al Poder Ejecutivo. Este seleccionará al titular del juzgado y enviará al Congreso el pliego que deberá ser aprobado por el Senado para concretar la designación que espera hace casi cinco años.

Pero no todo es armonía. En los tribunales federales de la capital de la Provincia y en algunos sectores de la política dudan de que el gobierno de Mauricio Macri mueva piezas en el fue-ro electoral, justo en un año comicial. La decisión del Consejo de la Magistratura está. Habrá que esperar.

 

Cómo es el proceso para seleccionar al nuevo juez federal de La Plata

La selección de jueces es tarea del Consejo de la Magistratura de la Nación. Para ello convoca a concursos, en donde los competidores deben sortear una “prueba de oposición escrita”, la “evaluación de antecedentes” y una “entrevista personal”. El concurso N° 348, destinado a cubrir el Juzgado N° 1 de La Plata, a cargo de los temas electorales de la Provincia, se inició el 22 de agosto de 2018. Ese día,

84 abogados rindieron la “prueba de oposición”. El examen, anónimo, se identifica con una clave y tiene una calificación de

0 a 100. El 13 de diciembre se concretó la “evaluación de antecedentes”, que puntuó igual. Con esas dos evaluaciones, el concursante logró un número, que se obtiene de la sumatoria de ambas calificaciones. A partir de allí se estableció un “orden de mérito”. El concurso seguirá ahora con

el sorteo de la comisión de selección, que define entrevistas. Eso ocurrirá en los próximos días. Después vendrá la elección de la terna de candidatos, que luego será llevada al plenario del Consejo. Aprobada, irá al Poder Ejecutivo, para que este la remita, como un pliego, al Senado nacional, para su designación final.

Alejo Ramos Padilla (183.5 puntos): Es quien mejor posicionado quedó en el “orden de mérito”. Se recibió de abogado en el 2000, en la Universidad de Buenos Aires (UBA). Ejerció la profesión de manera privada hasta 2011. Tiene un posgrado de la UBA en Administración de Justicia y es magíster nombrado por la Universidad de Jaen y el Consejo General del Poder Judicial de España en Derechos Fundamentales y Tutela Judicial Efectiva. En septiembre de 2011 fue nombrado juez federal de Dolores, cargo que ocupa hoy.

Domingo Montanaro (173 puntos): Montanaro figura en la segunda posición del “orden de mérito”. Es abogado desde julio de 1989. Fue auxiliar en el Juzgado Nacional en lo Criminal de Instrucción N° 24; el 8 de marzo de 1991 fue designado en el Juzgado Nacional en lo Criminal N° 23; y cuatro meses después, en el N° 6. En 2004 llegó a juez subrogante en el Juzgado Nacional en lo Correccional N° 2. El 1 de septiembre de 2017. Desde entonces ejerce la profesión de abogado particular.

Roberto José Boico (169 puntos): Abogado desde diciembre de 1996. En 2012 se desempeñó como Coordinador de Investigación y Desarrollo de Proyectos Institucionales en la Cámara de Senadores de la Nación. Entre 2015 y 2016 fue juez subrogante en la Vocalía 5 de la Cámara Federal de Casación Penal. Desde esa fecha ejerce la profesión de forma privada. En su currículum acumula posgrados en la Universidad de Buenos Aires y asistencias a jornadas, congresos y seminarios. Es docente en la UBA.