El economista y experto en comercio exterior, Miguel Ponce, dialogó con La Tecla y analizó el contexto de suba creciente del dólar, como así también la efectividad de las últimas medidas tomadas por el gobierno. Al respecto indicó: “El tema del dólar tiene un costado que no debiera sorprender, que no debiera dramatizarse, que es el habitual cambio que se produce al acercarnos a cualquier elección de esta naturaleza. Es decir, las empresas que trabajan en el país, que tienen disponibilidad líquida y los privados con capacidad de ahorro resuelven pasar al dólar como reserva de valor hasta que se sepa, primero, quién gana las elecciones, segundo quién es el ministro y tercero cuál es el programa o por lo menos las primeras medidas que puedan dar una idea de hacia dónde va a apuntar la macroeconomía”.
En esta línea agregó: “Esto se ha visto agravado en la Argentina por dos motivos, uno técnico y uno político. El técnico es la debilidad que tiene el gobierno para enfrentar cualquier tipo de corrida cambiaria, si estamos en menos diez mil millones de dólares en líquidos negativo en nuestras reservas, pero, además, tenemos 38.000, que seguramente ya son 40.000 millones de dólares de importaciones ya efectuadas con la mercadería ya nacionalizada en el país, pero adeudada, es decir, con los pagos pateados para adelante, esto genera una sensación de debilidad del gobierno para enfrentar una corrida”.
Asimismo expuso: “A esto hay que agregarle que si el principal o el candidato más votado en las PASO es alguien que promete dolarizar sin dólares, hay una migración al blue y la caída que se ha generado en los depósitos a plazo fijo porque toda renovación cae después del día 23 y por supuesto, esto genera una corrida que es la que estamos viviendo en estos días”.
Sobre lo que puede pasar con el dólar hasta el momento de los comicios el economista señaló: "La presión va a seguir, se le han acabado al gobierno algunos resortes para poder frenarlo. Lo que hay que tratar de evitar es que de acá a las elecciones la corrida cambiaria se transforme en corrida bancaria, es decir, la gente no solo renovando los plazos fijos, sino que retiren sus plazos fijos y dólares. Para eso el gobierno ha planteado un blindaje del sistema financiero, se importaron dólares para responder si hubiese esa corrida. Espero que eso no ocurra, creo que se va a llegar a las elecciones, aunque el blue va a seguir subiendo".
En referencia a si son necesarias las medidas que implementó la AFIP, Ponce agregó: "Esto no lo frenas con nada. Si uno de los candidatos dijo ayer a todo el mundo `váyanse ya del peso, no renueven ningún plazo fijo, porque el peso no vale un excremento, obviamente el intento de que se produzca una corrida y una devaluación antes de las elecciones, ese es el intento de (Javier) Milei. Por suerte, las respuestas desde afuera dicen explícitamente que no hay dólares y que no va a haber dólares para un proceso de dolarización, pero objetivamente estamos viviendo una dolarización fáctica, es decir, la gente, los particulares, el tipo que tiene algo, o sale a comprar bienes o esencialmente busca el blue. Son insuficientes las medidas que ha tomado la AFIP.
También destacó: “La pregunta es si se puede tomar algún tipo de medida cuando se vive en situaciones como esta. Yo no tengo recuerdo de que armando una comisión para monitorear las operaciones sospechosas contra el dólar o contra el peso, o largando los gendarmes a la calle, acompañando a la gente de la AFIP, se logre frenarla suba, pero el mercado termina, obviamente, encontrando su nuevo punto de equilibrio, o por lo menos acercándose a él".
En esta línea agregó: "No me extrañaría que dos o tres días antes de las elecciones tengamos fácticamente un feriado cambiario, para llegar tranquilos a las elecciones y preservar el proceso electoral, pero en realidad lo más probable es que se haga lo mismo que en el comercio exterior donde hay un apagón aduanero, que no se aprueba nada y se frenan los pagos, porque no aparecen los dólares para hacer pagos con el cambio de fechas o desaparecen las fechas ya aprobadas. La gente dio por seguro que se realiza la operación, pero al momento de hacer los pagos no aparecen los dólares".
Sobre el impacto en los precios y una eventual hiperinflación, señaló: “Septiembre viene nuevamente con dos cifras y esta semana se va a dar a conocer el índice de precios al consumidor que va a estar entre 12 y 13 por ciento, los alimentos y los consumos populares van a estar cerca del 15, pero es complicado lo que se ha producido en estos primeros días de octubre, donde hay remarcaciones y en los procesos de estoqueo no se quiere entregar mercadería, por eso empieza a haber faltantes, nuevos productos reemplazando a los que estaban bajo acuerdo y creo que objetivamente se produce un aceleramiento del pass through, que es el traslado a precios de la devaluación del peso. Siempre hay riesgo de hiperinflación, pero más que eso, estoy viendo un "rodrigazo", eso puede ocurrir, pero el aceleramiento y el fogonazo inflacionario fuera grande el peligro de hiper se acrecienta”.
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