Vía La Tecla Mar del Plata
La Quinta sección electoral es uno de los bastiones con los que cuenta Juntos por el Cambio. Al ser la segunda en materia de electorado, la zona es clave en las pretensiones de la coalición por vencer en Provincia y Nación. Ese es el terreno de Emiliano Giri, precandidato a diputado nacional, que asegura sentir reconocimiento por lo “que uno hizo y empujó durante más de 10 años en el PRO”, y que crean que “uno tiene la posibilidad de hacer un aporte desde otro lugar”. El presidente del PRO local y jefe de campaña del larretismo en la sección dialogó con La Tecla de cara a las PASO.
-¿Qué se juega en las elecciones del 2023?
-La Argentina está en un punto de inflexión donde lo que realmente se juega es la próxima década, cómo vamos a transitar los próximos diez años en el país. Ahí tenemos alternativas muy claras. Lo que viene tiene que ser salir de la trampa de la grieta en la que estamos viviendo hace quince o veinte años. Hay que construir mayorías, que no significa que pensemos igual, pero que sí acordemos las cinco cuestiones básicas que tiene que resolver la Argentina, que son la educación, el trabajo, la inflación, la seguridad y nuestra conexión con el mundo.
-En su rol de jefe de campaña del larretismo, ¿cómo ve la interna? La política puede alinearse, ¿pero el electorado?
-Sé lo que voy a hacer yo: el día 14 voy a trabajar por la persona que gane la PASO. Claramente, hasta el día 13 voy a trabajar incansablemente para que Horacio Rodríguez Larreta y Diego Santilli, y todo el equipo, ganen la elección. Hubo cinco precandidatos a Presidente y tres precandidatos a Gobernador que han depuesto sus actitudes, sus aspiraciones electorales en pos de construir algo superador. Creo en la formación de equipo, y creo que la discusión de la Argentina que viene no es mirando hacia atrás ni promoviendo permanentemente el enfrentamiento entre los argentinos, sino tratando de hallar puntos de encuentro que nos hagan salir de la situación en la que estamos. Si seguimos repitiendo la receta de los últimos veinte años, no nos va a ir bien.
-Se habla de una caída de Milei. ¿Eso lo favorece o perjudica en la interna, teniendo en cuenta que comparte electorado con Bullrich?
-Yo no sé si se va a desinflar o no. Creo que tenemos que discutir las propuestas que les vamos a hacer a los electores en lo que resta de campaña. La Argentina está sobrediagnosticada. La problemática es cómo vas a resolver el problema del empleo. La Argentina que viene no es ni la de “el vamos por todo” de Cristina ni el “a todo o nada”. Es
cómo vamos a transformar y hacer el cambio de nuestras vidas. Hay que salir de esta lógica donde lo que discutimos no es la plataforma sino candidatos.
-Resaltó en varias oportunidades la importancia de la gobernabilidad. ¿Es posible el diálogo con Unión por la Patria?
-La gobernabilidad se construye generando mayorías; en este caso van a ser legislativas y que nos permitan encarar las reformas, y que la garantía de esas mayorías sea que esas reformas que se encaran hoy se preserven los próximos diez años. Nosotros tenemos que hablar con todos. Dialogar con todos no significa acordar con todos. Yo tengo gente conocida, amiga, con la que pienso totalmente distinto, pero no me privo de hablar con
esas personas, porque, si no, estamos de vuelta en esta lógica de amigo con enemigo. Hablar hay que hablar con todos, especialmente con todos los que han sido electos a través de la
voluntad popular, porque esa es la democracia.
Las cualidades de Larreta y Santilli y qué permitió la “V” a Montenegro
-¿Cuáles son las principales cualidades de Rodríguez Larreta, Santilli y Montenegro?
-Horacio es un hombre que tiene una obsesión por el trabajo, tiene en ese sentido una capacidad casi ilimitada por formar equipos y por transformar. Ocho años jefe de Gobierno de la Ciudad, ocho años como jefe de Gabinete de la Ciudad, del proceso, creo yo, de trans-
formación más importante que tuvo una región argentina como CABA. En Diego reconozco la empatía para liderar. Me tocó trabajar con su equipo en la provincia de Buenos Aires del 2021, y el nivel de profesionalidad da gusto, porque no te encontrás muchas veces en la política con gente respetuosa y, además, que esté formada y con capacidad de gestión. Es una persona que ha pasado por distintas áreas: por Medio Ambiente, por Espacios Públicos, por Seguridad. La cualidad más importante de Guillermo es la cercanía, atender el metro cuadrado y haber entendido que Mar del Plata tenía que salir de la lógica del no.
-¿Qué tuvo de particular el trabajo en General Pueyrredon que dio como resultado ir con ambas boletas?
-Montenegro llevó adelante una gestión de coalición desde el comienzo, en el 2019. El tuvo una actitud muy respetuosa tanto con el espacio de Patricia como con el de Horacio. Es alguien que trabajó hasta último momento en la unificación, y eso, quizás, le da la autoridad para que de ambos lados lo reconozcan como garante. Además hay una realidad: Guillermo es una persona que tiene un acompañamiento por encima de la media tanto de Larreta como de Bullrich. En ese sentido, a los dos les sirve compartir boleta con él.
La Quinta sección y la Cámara Baja
-Uno de los datos altisonantes del cierre de listas fue la fuerte presencia marplatense en
las nóminas. En su rol como legislador, ¿qué línea de trabajo y qué proyectos se pueden
pensar vinculados a Mar del Plata y a la Quinta sección?
-En primer lugar, si tenemos la suerte de ser electos, la ciudad va a recuperar en la Cámara de Diputados un lugar que había perdido. Que la voz de Mar del Plata y de la región se
escuche en el Congreso, no solo en los discursos sino también en las comisiones de trabajo junto con la defensa de los intereses regionales, me parece que es importante. A lo que aspiro es a trabajar en las aristas que hacen a nuestra región, que tienen que ver con la cuestión de la pesca, con la rama industrial, con el sector agrícola y el turismo. Y ahora se sumaría la explotación de recursos hidrocarburíferos. Esos van a ser de los principales ejes de trabajo. Voy a enfocar mi energía tratando siempre de favorecer a la región y, sobre todo, también tratando de gestionar recursos nacionales; si bien nuestra actividad es legislativa, tenemos que tener un rol activo en la gestión de recursos para esos territorios. No podemos quedarnos permanentemente en la lógica de pensar que estamos ahí para sancionar leyes.
“Militancia sin formación me parece que es un error”
-Hoy el grueso del padrón está compuesto por jóvenes. ¿Cree que les está llegando la política? ¿Hay renovación?
-Yo creo que sí hay renovación y que muchísimos jóvenes se están involucrando. Creo que las nuevas tecnologías dan una oportunidad. Lo que pasa es que también confunden y creen que es fácil convertirte en candidato, y eso requiere de participación, de formación, de tener paciencia, de golpearse la cabeza contra la pared. También eso te permite aprender y formarte. Militancia sin formación me parece que es un error.
“Hay que saber estar a la altura de la gente, que es la que nos elige”
-Presidente del PRO, candidato a legislador, jefe de campaña. Más allá de los rótulos, ¿quién es Emiliano Giri?
-Soy hijo de Jorge y Graciela; el mayor de cuatro hermanos; esposo de Silvana, papá de
Alvaro y Martina. Que con ocho años, escuchándolo a Alfonsín en sus discursos por la televisión, me sentí totalmente cautivado por la política. Le pedí a mi tío, que era socialista
democrático, que me llevara a escuchar a todos los dirigentes políticos nacionales que
venían. Siento que tuve vocación para esto y que después de estar 40 años entrenando,
la vida y la política me dieron la oportunidad de estar donde me gusta estar. Espero estar a
la altura de la gente que confió en mí durante todos estos años, porque es un proceso donde uno no lo hizo solo, sino que pasó por un montón de cosas. Trabajé en un supermercado, un videoclub, fui boletero de un teatro, me tocó irme a vivir al exterior, repuse yogures en España. Fui parte de una empresa de desarrollo inmobiliario; luego, gerente y director
internacional. Volví y entendí que tenía que dar el paso en el 2013. Ahí participé por primera vez activamente en política, para intentar cambiar lo que no me gustaba. Eso me llevó a este lugar, pero siendo muy consciente de que la curva siempre la tenés cerca. Hay que ser bastante consciente de que esto no es fácil y, sobre todo, saber que, como decía el Tano Aprile, hay que saber estar a la altura de la gente. No podemos olvidarnos de eso, porque es la gente la que nos elige. Hay que escucharla y no fallarle.
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