Luciano Pereyra habló del momento más duro que le tocó atravesar

Luciano Pereyra fue al programa PH y recordó el duro momento que le tocó atravesar hace diez años atrás, cuando debió ser internado tras sufrir varios trastornos en el esófago. Luego de que Andy Kusnetzoff invitara al punto de encuentro a “los que alguna vez temieron por su vida”, el cantante dio un paso al frente y contó detalles de cómo lo vivió su entorno.

“Fue un momento raro, difícil. Estar 35 días internado, 10 días en coma farmacológico es heavy, por eso digo que en ese momento no caés que es lo que te pasa a vos, sino que es tu entorno familiar quien teme por vos”, relató el artista, que había sido diagnosticado con un divertículo en el esófago y por eso debió ser intervenido. 

Al ver la curiosidad del conductor, Luciano explicó cómo fue toda la operación. “Tuve un divertículo en el esófago, que es muy raro. Me lo operan, me lo sacan y vuelven a unir el esófago pero a mí se me hizo una fístula, se abrió, de ahí el líquido se fue al pulmón y me hizo una neumonía; estuve con neumotórax intubado por diez días. Me operaron de pulmón, drenaje por todos lados, fue muy fuerte”, aseguró, aunque admitió que tomó consciencia de lo que le había pasado tiempo después, al ver las cicatrices que le quedaron en el cuerpo. 

Además, también aprovechó y dejó una reflexión sobre las cosas que se deben valorar en la vida y la importancia de aferrarse en la familia. “A veces uno se preocupa por tantas cosas, te quejás de tantas cosas, cuando lo más importante es que te levantás a la mañana y podés ver, podés oler, podés sentir, tenés a alguien a quien amar, quien te ama; hay tanta frivolidad dando vuelta que a veces nos encajamos tanto en eso que no vale la pena, y lo más importante es el día a día, la red social humana que es tener en la mesa a tu familia, tu mujer, hijos, tus perros, lo que tengas; y aferrarse mucho a eso, que para mí es la base de la vida”. 

Antes de cerrar el tema, recordó la desopilante reacción del cantante español David Bisbal al ver las marcas de su operación. “Vamos al vestuario, me saco la remera y tengo cicatrices por todos lados, entonces me dice ‘tio, coño, qué te pasó’, y bueno David tuve un problemita, qué querés que te diga, no todo es bulería”, dijo entre risas, valorizando sus “tatuajes personalizados”.