Mientras crecen los casos de coronavirus en el país y sobre todo en la provincia de Buenos Aires, crece al mismo tiempo la desesperación de muchos sectores del comercio que no pueden abrir su puertas. Uno de los más golpeados es el de las peluquerías, que desde el comienzo del aislamiento social, preventivo y obligatorio tienen las persianas bajas y no saben cuándo podrán volver a levantarlas.
Al respecto, LaTecla.info se comunicó con el titular de la Cámara Argentina de Peluqueros Esteticistas, Cristian Ávila, quien detalló la difícil realidad del sector. "No tenemos nada, estamos en foja cero.Ya estamos en la fase de la desesperación. Hay peluqueros que están haciendo empanadas, pizzas. Es muy angustiante. El peluquero tiene una economía del día a día, porque trabaja todos los días. Nos encontramos con colegas que están muy mal. Vamos a llegar a 100 días sin trabajar, es una locura", disparó Ávila.
En la misma sintonía, el referente del sector argumentó que no hay razones para que no los dejen abrir. "Las peluquerías puntualmente es de los rubros más higiénicos del país. Agregar un barbijo es un trámite sencillo. Pero además podemos trabajar por turnos. No hace falta mucho", agregó.
En tanto, Ávila esbozó una alternativa ante la negativa al permiso para realizar la actividad. "También tenemos productos de tratamiento facial, corporal, de la piel, que tienen que ver con lo medicinal. Y hoy no los podemos vender. Por lo menos queremos que nos permitan vender productos, ya que no podemos atender. Que nos dejen abrir para vender suplementos, como una tienda. Con eso podemos vivir. Es un horror lo que pasa".
Por otra parte, el titular de la Cámara Argentina de peluqueros realizó una autocrítica en torno a la organización del sector. "Tenemos un sector muy independiente, que está muy disperso, no está aglutinada. La confederación de peluqueros de la provincia no existe, son tipos que tienen más de 80 años. La peluquería es un trabajo de lunes a lunes y no tenés tiempo para organizarte, reunirte, darle una coyuntura política. La pandemia nos agarra como un sindicato flojo", expresó.
En este sentido, Ávila remarcó que "al no estar sindicalizado, muchos trabajan a comisión y si no cortan no cobran. No tienen un sueldo. Es una problemática mayúscula y un panorama muy desalentador. No encontramos un grado de solidaridad ni que se hayan puesto a estudiar el tema".
Por último, el representante de los estilistas indicó: "estamos hablando en aquellos distritos donde no hay casos ver si allí se puede hacer u pedido local y que puedan abrir. Porque a nivel provincial no tenemos respuestas".
Marcha de las tijeras
Semanas atrás, se llevó a cabo la segunda edición de la marcha de las tijeras, en la que los peluqueros y peluqueras de la ciudad de La Plata reclamaron para que les permitan abrir sus locales, como estaba previsto, con todas las medidas sanitarias y precauciones correspondientes.
Los manifestantes se concentraron en calle 12 y 54, movilizándose hasta 12 y 63, con secadores de pelos, tijeras e instrumentos de peluquería para visibilizar el tipo de reclamo.
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