Antes de compartir escenario con presidente de la Nación, Mauricio Macri, la gobernadora María Eugenia Vidal visitó este lunes el distrito de San Miguel, gobernado por el oficialista Jaime Méndez.
Así, la mandataria sigue sumando presencia en distritos del Conurbano, como parte de su "reperfilada" campaña con vistas a las generales de octubre, que reemplaza contacto por redes y medios.
"Los quiero todos los días en la calle, hablando con la gente", lanzó Vidal a los "sin tierra" del Conurbano días atrás, en un intento por recortar la abultada distancia que le sacó en las PASO el candidato del Frente de Todos, Axel Kicillof.
Predicando con el ejemplo, la gobernadora se puso la campaña al hombro y comenzó a "patear" los distritos, aunque el de este comienzo de semana encierra, para algunos observadores, un morbo especial.
Es que San Miguel encabezó el listado de municipios con "tijeretazo", es decir, de aquellos en los que hubo un sospechoso nivel de corte de boleta en las primarias, en este caso en favor del alcalde y, por propiedad transitiva, para su jefe político, el Ministro de Gobierno y exjefe comunal de ese distrito, Joaquín de la Torre.
De hecho, con la boleta de Juntos por el Cambio, Méndez ganó la elección por 10 puntos, mientras que Vidal perdió por 12 ante Axel Kicillof.
A pesar de que en la actualidad se asegura, desde el comando de campaña vidalista, que la relación es normal, hay quien tiene anotada tal circunstancia en su "libreta de facturas", que podría llegar luego de superada esta emergencia electoral.
El desembarco de Vidal en San Miguel comenzó con una visita al nuevo Hospital Municipal Santa María, para luego dirigirse al centro comercial, donde intercambió conceptos con vecinos y comerciantes locales.
Tras la visita al nosocomio local, la gobernadora aseguró que "los vecinos ahora tienen otro centro de salud donde atender sus consultas y urgencias las 24 horas, con la tranquilidad de que los van a cuidar como se merecen".
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