Ver pornografía puede ser un pasatiempo para muchos, para otros una forma de encender la pasión en la recámara y para otros una adicción, según un estudio publicado en el Journal of Sexual Medicine. El estudio, que tomó en cuenta los hábitos de consumo de videos eróticos de 830 hombres y mujeres adultos, clasificó en tres los tipos de espectadores de porno: recreacionales, angustiados y compulsivos. |