Argentina
Viernes, 29 marzo 2024
TARIFAS
17 de mayo de 2018

Diputados y la quita de impuestos: desconfianza, presiones, acuerdos y traición; las palabras clave

En Cambiemos van "sí o sí" por la media sanción que resta, pese a que a muchos de los propios no les guste ni medio. Los intendentes peronistas, los únicos que se quejan aún (antes también lo hicieron los oficialistas) intentan que los legisladores de todas las bancadas opositoras no caigan en la tentación. Al oficialismo le faltarían dos voluntades. En El Senado hubo unidad peronista. ¿Y en la Cámara baja?

Diputados y la quita de impuestos: desconfianza, presiones, acuerdos y traición; las palabras clave - La Tecla
Diputados y la quita de impuestos: desconfianza, presiones, acuerdos y traición; las palabras clave - La Tecla
Diputados y la quita de impuestos: desconfianza, presiones, acuerdos y traición; las palabras clave - La Tecla
Diputados y la quita de impuestos: desconfianza, presiones, acuerdos y traición; las palabras clave - La Tecla

Se quejan y reclaman los intendentes del peronismo, también los del radicalismo y los del Pro. Pero en voz alta sólo lo hacen los primeros. Los otros ya no tienen chances. El Senado aprobó hace exactamente una semana la eliminación de dos impuestos que gravan las tarifas de luz y de agua, cuya recaudación se reparte entre los municipios. Eso, en caso de avanzar la medida, dejará de suceder.

Tal como se viene informando, la norma tiene dos artículos. Uno modifica la contribución de las prestatarias eléctricas a los municipios, la cual pasa del 6 por ciento al cero con cero uno por ciento “de sus entradas brutas”. El otro artículo es el que en lo que respecta a la factura de gas pasa de una contribución del 3 por ciento a una de 0,01 por ciento.

Números más, números menos, los jefes comunales del oficialismo y la oposición, todos, dejarían de recaudar unos 1.300 millones de pesos al año. Por eso justamente la negativa generalizada. Pero hubo un pedido expreso de la gobernadora Vidal y eso a esta altura es palabra Santa. Los radicales y macristas tuvieron que hacer silencio y aprobar. Eso sí, se hicieron escuchar. Despotricaron, sin éxito, pero despotricaron.

Antes de la media sanción de la Cámara alta y luego del paso por las comisiones (en principio se pensaba aprobarlo sobre tablas) se produjo el primer cruce grande de oficialistas. Fue en un encuentro entre el jefe de Gabinete, Federico Salvai y los alcaldes Jorge Macri (Vicente López), Néstor Grindetti (Lanús) y Ramiro Tagliaferro (Morón), quienes le habrían hecho a saber a la mano derecha de la Gobernadora algo que ya sabía, que a partir de la modificación iban a perder un dinero importante.

Salvai, en un tono poco amistoso, habría invitado a los tres protestantes a conseguir la plata que se les iba por otro lado, remarcándoles que eran oficialismo y que el problema en el que se encontraban metidos por estos días no era económico sino político. En resumen, les habría comentado, siempre según la fuente allegada a Gobierno, que “si nosotros no bancamos esto, se puede ir todo a la mierda”.

A partir de ahí, las cosas quedaron bastante claras. Los macristas y los radicales dejaron de hacer ruido y una vez en el recinto, Cambiemos levantó la mano unánimemente, pese a que muchos, sobre todo los senadores con territorio, lo hicieron de mala gana. La oposición, como hace tiempo no sucedía, votó en contra en su totalidad. Hacía falta la mayoría simple. Con el oficialismo alcanzaba y sobraba (tiene 29 de 46). Pero en Diputados en distinto. Y esa es la batalla que se viene.

En la Cámara baja, los conducidos por Maximiliano Abad suman cuarenta y cuatro, por lo que faltarían dos para llegar a la mitad (desempataría Manuel Mosca, el presidente del cuerpo). Se puede contar como propio al ex massista del bloque de Integrar, Fabio Britos, y la suma llegaría a cuarenta y cinco. Todavía estaría faltando uno. Entonces, en caso que las bancadas peronistas y el legislador de la Izquierda voten juntos, se estará en presencia de una derrota de Vidal.

Claro, en calle 6 no quieren saber nada al respecto, pero tampoco están dispuestos a negociar y dar el brazo a torcer. "Nosotros no bajamos, sale así", dice una fuente allegada a la Gobernación al referirse al proyecto que ya tiene el ok del Senado, y agrega que "quienes tienen que negociar y convencer a algún bloque peronista o a algún diputado peronista son Mosca, Abad y Daletto (Marcelo, presidente de la Comisión de Presupuesto). Incluso, la propia Vidal sale a la cancha. La recorrida de ayer por Merlo, junto al intendente y presidente del PJ bonaerense, Gustavo Menéndez, no parece casual. 

Los intendentes Justicialistas, los únicos que quedaron con voz para quejarse, miran de reojo lo que sucede en los pasillos de la Legislatura y por supuesto, no confían demasiado en la totalidad de los diputados de la oposición. "Ya pasó esto antes, con un par de faltazos estamos al horno, Cambiemos conseguiría la mayoría que necesita; queremos que estén todos, que no se enferme nadie, para eso hacemos estas reuniones", contó en off uno de los intendentes que ayer asistió al cónclave realizado en La Plata.

Por el momento no hay sesión convocada, por lo que se presume que no hay acuerdo aún, que Cambiemos no tiene los números para que el proyecto se convierta en ley. "No hay apuro, la sesión puede ser la semana que viene o la otra; no pasa nada", cuentan un diputado de Cambiemos, que se anima a señalar que "hay negociaciones con la oposición, pero nada definido aún; queremos cumplir con el pedido de Vidal, a cualquier precio", completa.

Opositores y oficialistas se mueven para todos lados con la calculadora (N de la R: para contar legisladores) y con el teléfono celular siempre con batería y buena señal. "Y los intendentes del PJ tendríamos que estar atentos al botiquín; sería una locura que alguno de los diputados se nos resfríe y se vea en la necesidad de faltar. Es sencillo, el que no está el día de la sesión nos está cagando", afirmó sin vueltas un alcalde del interior profundo.

Así va la previa de la todavía no convocada sesión de la Cámara baja; entre reuniones, llamados y negociaciones que si bien existen tal vez nunca se conozcan. La batalla es política, no económica. Vidal, que con su alta imagen sostiene al presidente Macri, no puede perder la votación en Diputados. Y los intendentes, en caso de perderla, tendrán que hacer malabares para que sus arcas no compliquen más de la cuenta. Si ganan, después tendrán que explicar "porqué los vecinos siguen pagando más", pinchan en Gobernación.

Veintidós de Unidad Ciudadana, doce del Frente Renovador, ocho del PJ UNidad y Renovación, dos del Peronismo Kirchnerista, dos de Convicción Peronista y uno del Frente de Izquierda. Cuarenta y siete diputados opositores en total. Si dos de ellos faltan a la sesión (siempre y cuando en la previa ninguno de los bloques explique porqué decide acompañar a Cambiemos), el oficialismo ganará la votación y en el dividido peronismo otra vez se hablará de traición. En el Senado hubo unidad. ¿Y en Diputados?

Calle 44 Num. 372 La Plata, Buenos Aires. Argentina
+54 (0221) 4273709
Copyright 2024 La Tecla
Todos los derechos reservados
By Serga.NET