En las últimas horas salió a la luz un nuevo entramado que salpica de lleno al ministerio de Salud conducido por Zulma Ortiz. En definitiva, un movimiento en una de las áreas y que parecía que no tendría grandes repercusiones, acabó por despertar una serie de denuncias cruzadas que ponen a la funcionaria en el ojo de la tormenta.
Es que, por decisión de la ex Unicef, se cambió al director de la Región Sanitaria III, que abarca a Chacabuco, Florentino Ameghino, General Arenales, General Pinto, General Viamonte, Junín, Leandro N. Alem y Lincoln. Se trata de Marcelo Lerda, quien fue nombrado en el cargo al llegar al gobierno Cambiemos.
Conforme a la información oficial, el despido del titular del área se debió a la distribución de vacunas para niños que debían ser destruidas. Según explicaron, las dosis habrían sido aplicadas en chicos de Leandro N. Alem y Junín.
Cabe destacar que las vacunas en cuestión, son las denominadas Sabin (trivalente) u OPV que desde finales de 2015 deben ser reemplazadas por decisión de la Organización Mundial de la Salud. En nuestro país, desde abril del 2016 se avanzó con la medida. No obstante, las vacunas obsoletas habrían llegado a la Región Sanitaria III y durante el receso estival del máximo responsable, Lersa, se habrían aplicado en chicos de la zona.
En ese marco, desde la cartera se pidió la renuncia del director del área y al no hacer caso al reclamo de Ortiz, se tomó la decisión de despedirlo. Sin embargo, tras la separación de su cargo, Lerda apuntó contra la ex Unicef y la acusó de ser la máxima responsable por la distribución de vacunas obsoletas.
En su defensa, el ahora ex director señaló que: “Estuve de vacaciones fuera de Junín del 6 al 26 de enero, en ese lapso unas vacunas Sabin aparecieron en la Región Sanitaria sin saber por qué, cuando debían haber sido destruidas anteriormente”.
Asimismo, acusó que podría tratarse de una maniobra política para dar con su salida. “Hay dos personas con alto rango en la Región Sanitaria que aparentemente no se dieron cuenta. Pero lo más grave es que esas vacunas se repartieron cuando debieron haberse destruido”, relató a medios juninenses.
“Me interesa, es que se conozca la verdad, que salga a la luz si fue un sabotaje o una maniobra delictiva”, sentenció Lerda que comparó lo sucedido con la dictadura: “esto me hace acordar a la época de la dictadura, cuando te llamaban de un momento para el otro y nadie te daba ninguna explicación”.
El ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires y su titular, Zulma Ortiz, volvieron a quedar en el ojo de la tormenta tras acusaciones cruzadas. |