Tal como informó La Tecla.info ayer, se demora la votación del Presupuesto y de la Ley Impositiva. Ambas normativas están en plena negociación, y si bien el acuerdo entre Cambiemos y el FR aparece como cerrado, el oficialismo no logra conseguir los dos tercios necesarios para asegurarse la votación del endeudamiento.
Aunque no está demasiado lejos, para poder avanzar, Cambiemos necesita que al menos un sector del peronismo ceda. Por ahora, los distintos bloques que provienen del Frente para la Victoria se mantienen en una postura común. En Diputados apuntaban a los seis integrantes del Peronismo para la Victoria-FpV, pero no hubo suerte.
Incluso, ayer se iba a realizar una reunión de la Comisión de Presupuesto de la Cámara alta, en la cual se iba a tratar el tema Presupuesto, pero la misma no pudo desarrollarse por falta de quórum. Todo bastante trabado.
La demora no es lo esperado por el Ejecutivo, que pensaba contar con la Ley lo antes posible. De hecho, el artículo 34, donde se solicita un permiso de endeudamiento de ocho mil millones de pesos, tiene la intención de cubrir un déficit de este año.
Así las cosas, las reuniones continúan y la desesperación empieza a apoderarse de algunos actores, aunque por el momento lo disimulan bastante bien. Pero esa desesperación no estaría llegando a los intendentes, que se sienten seguros de contar todo el peronismo, y por ende con el Fondo de Infraestructura.
"El peronismo legislativo está unido, no se van a llevar nadie", dice ante La Tecla un jefe comunal del interior,. y agrega que "es la única manera de imponernos, es la única manera de lograr el Fondo de Infraestructura por Coparticipación", resalta.
Ya más en lo finito, el alcalde dice que "la bancada más dudosa era la del Chino Navarro, pero nos jura y nos re contra jura que va a votar con nosotros, que si bien tiene arreglos con el Gobierno de Vidal, estos nada tienen que ver con el Presupuesto", afirma el dirigente peronista.
Para dar crédito a las palabras que Navarro y los suyos expresan a los jefes comunales, hay que decir que en la última reunión de intendentes y diputados llevada a cabo el miércoles, el mencionado "Chino" y su par de bancada Graciela Rego, dijeron presente.
Palabras y más palabras. Pero importan los números. En la Cámara baja,el número de la felicidad para Vidal es sesenta y dos. Sí, éstos son los votos que el oficialismo necesita para sacar el endeudamiento. Por el momento, los seguros suman cincuenta y cinco, que son los de Cambiemos, el FR, Justicialismo Bonaerense, GEN y Peronismo Bonaerense.
Todavía faltan siete. Pero la idea es que falte uno. Para eso Vidal necesita que la bancada que lidera Navarro (Peronismo para la Victoria - FpV) juegue toda en su favor. “Es posible, pero no seguro”, afirmaba la semana pasada un referente macrista. El legislador agregaba que “también podría darse que no toda la bancada levante la mano, sino algunos”.
Así las cosas, en el hipotético caso de que estas seis voluntades aprueben, todavía estaría faltando un voto. ¿De dónde puede salir? Las miradas apuntan al FpV - PJ, que preside Walter Abarca. “Al bloque entero, no; de a uno come la gallina y se alimenta”, dijo un campero radical.
A modo de cierre, las palabras de del senador Santiago Carreras. “Esperemos que el peronismo pueda seguir unido, pueda encarar el tema unido; de esa manera haremos más fuerte nuestra posición”, decía ante La Tecla el senador kirchnerista.
"La mejor y la única forma de negociar es estar todos juntos (los cuatro bloques justicialistas); de lo contrario no tenemos chances”, señalaba días atrás un allegado a la bancada FpV, y resaltaba que “tenemos que evitar que el Gobierno trate de acordar de manera individual, porque perdemos”; y casi a modo de advertencia suelta: “No creo que haya traidores esta vez, es mucho lo que está en juego y mucho lo que se arriesga”. |
