Arrinconado por la crisis, Arroyo hace propio el manual de la Gobernación
El intendente de Mar del Plata recortó el salario de los cargos políticos en un 10 por ciento. La decisión fue uno de los pedidos del Ejecutivo provincial, señalan en la ciudad.
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La ciudad de General Pueyrredon no atraviesa sus mejores días. Luego del paro histórico de los trabajadores estatales y la grave crisis económica, una ayuda de la provincia de Buenos Aires sirvió para que La Feliz vuelva a hacerle honor a su apodo.
Sin embargo, en la comuna saben que deben revertir la situación y evitar llevar a cabo otro pedido de dinero al gobierno de María Eugenia Vidal.
Según aseguraron fuentes de la ciudad atlántica, en los últimos encuentros entre Carlos Arroyo y la gobernadora, el Intendente habría recibido algún ultimátum. En ese sentido, el consejo del gobierno fue reducir los sueldos de la planta de cargos políticos que, según denunció la oposición a La Tecla, supera los 120 nombramientos.
En ese sentido, siguiendo las ordenes de la Provincia, en las últimas horas el Jefe Comunal redujo un 10 por ciento el sueldo de sus funcionarios. El gobierno comunal busca reducir los gastos y esa disminución salarial sería el primer gesto hacía Vidal y compañía para que los lazos no acaben por cortarse.