A partir de las crecientes versiones sobre la posible exploración de hidrocarburos en el sur de la provincia de Buenos Aires, mediante la técnica de fractura hidráulica o fracking, por parte de la empresa estatal YPF, varios concejos deliberantes expresaron su inquietud, y pidieron que se presenten estudios de impacto ambiental al gobierno provincial. Ante esta preocupación, los ediles de los municipios que verían perjudicado su ecosistema planean alinearse para unificar un proyecto en común.
El año pasado, el presidente de YPF, Miguel Galuccio, presentó la incorporación de nuevas zonas de exploración para aumentar la producción tanto de petróleo y gas, como uno de los objetivos fundamentales de la empresa estatal.
En Buenos Aires las miradas están agrupadas en el potencial hidrocarburífero de la Cuenca de Claromecó, que tiene una extensión de 45.000 kilómetros cuadradosy abarcaría a los distritos de Laprida, San Cayetano, General La Madrid, Tres Arroyos, Tornquist, Coronel Suárez, Saavedra, Coronel Pringles, Monte Hermoso, Gonzales Chaves, Coronel Dorrego, Benito Juárez, Tandil, Bahía Blanca, Coronel Rosales y todo el sistema orográfico de Ventana.
La explotación de los pozos de petróleo y shale gas se harían a través del fracking, un método muy cuestionado porque sería altamente contaminante.
El tema es que para la fractura hidráulica se inyecta agua, arena y componentes químicos a alta presión, para fracturar la roca madre y poder extraer los hidrocarburos.
Según estudios realizados, en cada pozo se realizan cerca de quince fracturas con un uso del agua de 20.000 metros cúbicos y el agregado de unas 400 toneladas de productos químicos diluidos.
El gobierno bonaerense destacó que vienen trabajando y llevando adelante, con un grupo de profesionales de YPF, exploraciones para determinar la existencia de hidrocarburos en la Cuenca de Claromecó.
Sobre el tema, el ministro de Infraestructura provincial, Alejandro Arlía, celebró los trabajos que vienen efectuando profesionales de la Gerencia de Nuevas Cuencas de YPF S.A. para “determinar la existencia de hidrocarburos como gas y carbón en la ciudad balnearia de Claromecó”.
Arlía subrayó que “esta producción y riqueza se traduce en beneficios para sus quince millones de habitantes y para todos los argentinos”.
Sin embargo, desde las comunas no verían con buenos ojos esta posibilidad, ya que sería perjudicial para la salud y el medio ambiente.
El Concejo Deliberante de Carmen de Patagones aprobó hace un tiempo una ordenanza por la que se plasma que “las operaciones de perforación pueden causar una degradación severa del paisaje y contaminación acústica. Estas pueden afectar a las poblaciones cercanas y a la fauna local a través de la degradación del hábitat”.
Otro municipio que planea seguirle los pasos a Carmen de Patagones es Tres Arroyos. Los concejales de la Unión Cívica Radical y de la Coalición Cívica - ARI presentaron proyectos de ordenanza en los que se remarca: “Declárese al municipio de Tres Arroyos, dentro de los límites de todo su territorio, libre de la exploración y/o explotación de gas no convencional mediante la técnica de fracturación hidráulica o fracking”.
“La realidad es que no se analizó el tema con el intendente. Averiguamos en OPDS y no se puede hacer un estudio de impacto ambiental porque aún YPF no nos presentó ningún proyecto”, dijo el secretario de Producción de Tres Arroyos, Juan José Etcheto.
El jefe comunal que se mostró de acuerdo con la posible exploración es el de Tornquist, Gustavo Trankels. El mandatario indicó que “los cuestionamientos de los concejales y de las ONGs están inducidos por la falta de información, o la desinformación que a veces es vertida adrede y de manera maliciosa”. En ese sentido declaró que “ir a informarse es la primera obligación de los funcionarios y concejales, que son los que legislan al respecto; y de darse una ordenanza sería bueno que estén bien informados”. El alcalde agregó que “lo vemos como una posibilidad lejana, pero, de darse, sería un impacto muy alto para la región, y por supuesto que va a ser positivo”.
Un dato no menor es que de los quince municipios en cuestión, once pertenecen al arco kirchnerista y, si siguen la lógica y órdenes de la Casa Rosada y de la gobernación provincial, les será muy difícil decir que no a la exploración que quiere realizar YPF.
En los próximos días se verá si los intendentes escuchan el pedido de la sociedad o si acatan las órdenes de sus jefes políticos. |
