Sectores populares eligen a Javier Milei: cómo dar vuelta la tortilla
La Libertad Avanza permea en la franja de la población más golpeada por la crisis y enciende las alarmas tanto en el peronismo como en la izquierda. La estrategia de los movimientos sociales para revertir la situación
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Las elecciones primarias dejan todavía elementos de análisis para las distintas fuerzas políticas, y uno de los aspectos más indagados tiene que ver con la aceptación que ha logrado La Libertad Avanza (LLA) en los sectores populares, que hasta no hace mucho tiempo optaban por variantes del peronismo o incluso la izquierda. Las organizaciones sociales, que despliegan su militancia en los barrios más postergados, recalibran sus estrategias para evitar que Javier Milei sea un canal de expresión del enojo ante la falta de respuestas de los gobiernos a problemas medulares.
Milei fue el candidato presidencial más elegido en 16 provincias y dejó en evidencia que se llevó los votos tanto de Unión por la Patria (UP) como de Juntos por el Cambio (JxC) y, en menor medida, del Frente de Izquierda Unidad (FIT-U). El panorama hacia las generales es totalmente incierto y una eventual segunda vuelta es la gran apuesta del oficialismo.
La provincia de Buenos Aires es el territorio en el que se libran batallas fundamentales que marcarán el destino de los comicios de octubre. Asimismo, el Conurbano es la zona más caliente donde las alternativas políticas desarrollan sus acciones y en la que también se visualiza lo más crudo del momento que atraviesa el país. Los altos niveles de precarización laboral, desocupación, pobreza e indigencia en un contexto inflacionario que se profundiza tras la devaluación hacen un caldo de cultivo para el hastío de los sectores más castigados. En esta región, UP fue la alianza más votada en 18 municipios, y JxC en 6, por lo que el justicialismo consiguió mantener su liderazgo. Sin embargo, LLA logró ser la opción con mayor adhesión para candidato a Presidente y en los distritos se ubicó en segundo o tercer lugar.
Al respecto, un informe publicado por el Observatorio del Conurbano Bonaerense, del Instituto del Conurbano (ICO) de la Universidad Nacional de General Sarmiento (UNGS), arrojó que “al comparar estos resultados con las elecciones previas de 2021, La Libertad Avanza ha ganado terreno significativamente”. Además detalló que “en aquel entonces, la concentración de votos estaba mayormente compartida entre el Frente de Todos y Juntos por el Cambio, llegando al 75% u 80% del total”, y que ahora “ambas fuerzas han descendido a alrededor del 60%, indicando un cambio en la dinámica política y una mayor competencia en el panorama electoral”.
En este marco, La Tecla dialogó con los movimientos sociales que juegan en la arena electoral para conocer de primera mano qué análisis hacen de lo acontecido y cómo harán para evitar más fugas de votos de sectores populares hacia Milei. Si bien el postulante de LLA tuvo una transversalidad en su electorado, no deja de llamar la atención que haya captado el interés de capas sociales que históricamente votaron peronismo u otras variantes más vinculadas con la defensa y la ampliación de derechos.
Con coincidencias y diferencias lógicas, desde el Movimiento Evita (integrante de UP) y el Polo Obrero (llama a votar al FIT-U) se mostraron comprensivos con la reacción de la gente, y lo adjudicaron a la crisis que se vive por estos tiempos y a los problemas no resueltos desde hace décadas. Del mismo modo afirmaron que llevan a cabo un trabajo arduo de debate en pequeños grupos para profundizar sobre lo que -consideran- esconde realmente la propuesta de LLA.
El desafío ya está en marcha: cómo dar vuelta la tortilla para que quienes eligieron a Milei, o piensan hacerlo, no lo hagan y busquen otras alternativas. Un camino complejo mientras, por un lado, el Gobierno no seduce y, por otro, la izquierda intenta mostrarse como una verdadera alternativa de poder.
GILDO ONORATO - MOVIMIENTO EVITA De la “crisis de representatividad” a evitar “un salto al vacío”
En diálogo con La Tecla, Gildo Onorato, dirigente del Movimiento Evita, dio a conocer la evaluación sobre el resultado de las elecciones primarias y trazó un panorama de lo que circula por los sectores populares.
En ese sentido dijo que “si bien parece algo que sorprendió había indicadores en la sociedad que permitían pensar que una experiencia outsider como esta pueda tener un caudal electoral importante, teniendo en cuenta el grado de desigualdad que se ha consolidado en la Argentina con la pobreza estructural y que la política estuvo mucho tiempo en la interna del palacio”.
En cuanto a lo cosechado por Javier Milei en las urnas sostuvo que “aparece como una fuerza expresiva, no representativa sino expresiva de un hartazgo y una bronca”. Agregó que “eso no significa que la elección esté definida, sino que fue el resultado de una primaria. Creo que no tenemos que enojarnos, ni mucho menos entrar en la desazón, es un escenario reversible”. En cuanto a las tareas que llevan a cabo en los barrios sobre la discusión electoral contó que “nosotros en particular, lo que estamos haciendo son muchas asambleas de cercanía, con no más de 30 personas escuchando, reconociendo las dificultades y planteando una agenda muy concreta de los sectores populares“.
Además consideró que “a Milei no se lo ve como una opción alternativa, se lo ve como una novedad, como algo raro, fuera de lo común de un sistema político, de una democracia representativa en la crisis profunda”. Continuó Onorato: “Lo que nosotros tenemos que trabajar es, primero, con medidas concretas; segundo, escuchar y reconocer los errores y las desigualdades que hay en nuestro país, y tercero, plantear que el camino para estabilizar y para construir una integración social plena no son las alternativas que nos llevan a un salto al vacío”.
Para finalizar, el dirigente social que integra Unión por la Patria remarcó que “tanto Axel Kicillof como Sergio Massa son expresiones de una Argentina que se puede proyectar al futuro con una nueva etapa y con una nueva generación dirigencial”.
EDUARDO BELLIBONI - POLO OBRERO “Hay que prepararse para un eventual triunfo de este fascista”
Eduardo “Chiquito” Belliboni, el líder del Polo Obrero, dio su lectura sobre cómo impregna La Libertad Avanza en los barrios vulnerados y adelantó que se preparan para dar la batalla tanto en las urnas como en las calles. En declaraciones a La Tecla expresó que “nosotros, al fenómeno de Milei no lo tomamos nunca a la ligera. Vimos ya hace bastante tiempo, no por el resultado electoral, sino anterior eso, que un sector de los barrios populares miraba con simpatía las cosas que decía él”.
Entonces explicó que “nos dimos una política entendiendo lo que significa: un antiderecho, un antipiquetero, que salía a decir ‘si yo soy gobierno los voy a meter en cana a todos los que marchan’. Claramente vimos un peligro muy fuerte en esto”.
Añadió: “Milei dice que es todo una porquería; y para mucha gente en un barrio donde no tiene nada, con un laburo precario, que tiene un plan con toda la furia, también la situación está vista desde ese lugar como que está todo mal. Lógicamente, nosotros no creemos eso, defendemos la educación y la salud pública; pero hoy, para mucha gente esto es papel mojado”.
En esa línea, además disparó: “Hemos hecho una crítica muy fuerte también a las centrales obreras sobre esto, que no se dirigieron a ese sector, que lo abandonaron a su suerte, como ya ocurrió con los desocupados durante el menemismo”. Belliboni consideró que “el debate que planteamos es que Milei es un agente de los intereses del gran capital. Siempre fue eso; se viste como un anticasta pero ha sido siempre parte de la casta. Un hombre que vivió de los ingresos de las grandes empresas como consultor y viene a manifestarse como la reacción política contra los trabajadores. Quiere arrasar con los derechos”. Más adelante resaltó que “nosotros, por supuesto, vamos a votar a Myriam Bregman, pero creemos que el problema no se resume en eso, a quién va a votar. Entendemos que lo más importante de las organizaciones sociales es que peleen con sus reivindicaciones para prepararse para un eventual triunfo de este fascista, porque, claramente, lo calificamos a Milei de fascista”.
Por último, el dirigente de izquierda señaló: “La movilización tiene que estar en rechazo al ajuste y a favor de los reclamos que tienen planteados los trabajadores. Nosotros no podemos bajar la guardia y no salir a luchar por nuestras reivindicaciones”.
